La juez federal Edith Alarcón, rectora del concurso mercantil de Mexicana de Aviación, dio este jueves un ultimátum al conciliador del proceso, José Gerardo Badín, para que a más tardar en tres días hábiles, que vencen la próxima semana, entregue al juzgado la versión definitiva de la propuesta de convenio con acreedores, paso indispensable para una eventual restructura de la empresa, o de lo contrario la juez dará por concluido el juicio, revelaron funcionarios judiciales cercanos al caso.

Requiérase a José Gerardo Badín Cherit, en su carácter de conciliador de la concursada mediante notificación personal, para que dentro del plazo de tres días siguientes en que surta sus efectos la notificación del presente proveído, exhiba la versión definitiva de dicho convenio concursal, acordó la juez para el caso de Mexicana de Aviación.

La orden de la juez Edith Alarcón indica que el final del procedimiento de concurso se aproxima, ya sea con un rescate o con la declaración de quiebra, luego de que un tribunal colegiado de circuito declaró ilegal la suspensión indefinida de la etapa de conciliación del concurso, decretada por el antecesor de Alarcón, Felipe Consuelo Soto.

Una vez que Badín presente la versión final del convenio, se abrirá un plazo de 10 días para que lo firmen los acreedores interesados, y siete días más para someterlo a la aprobación de la juez, o para que los dueños de al menos 50 por ciento de la deuda apliquen su derecho de veto.

En septiembre de 2012 los dueños de 51.3 por ciento de la deuda de Mexicana estaban dispuestos a firmar el convenio propuesto por Badín, cifra apenas superior al mínimo que requiere la Ley de Concursos Mercantiles, que es más del 50 por ciento, para dar validez a un convenio, recordaron las fuentes consultadas.

En febrero de 2012, cuando se suspendió de manera indefinida el procedimiento, Consuelo Soto había informado que los dueños de 65.2 por ciento del pasivo estaban de acuerdo con la propuesta de Badín, que implicaba una quita de alrededor de 82.4 por ciento de la deuda.

A estas alturas no está claro si existe disposición de los dueños de más de 50 por ciento del pasivo para apoyar un convenio.

El pasivo total reconocido con derecho a votar un convenio, que excluye las deudas fiscales, asciende a mil 775 millones de udis, unos 7 mil 990 millones de pesos, y en septiembre Badín expuso a la juez que los dueños de 911 millones de udis estaban dispuestos a firmar, entre ellos, Aeropuertos y Servicios Auxiliares, que tiene un crédito con garantía hipotecaria por 267 millones de udis.

Incluso si existiera mayoría de acreedores en favor del convenio, y se mantuviera la quita de 82.4 por ciento lograda por Badín en 2012, se requerirían unos mil 400 millones de pesos sólo para liquidar a todos los acreedores, a lo que se tendrían que sumar 316 millones de udis en deudas fiscales, es decir, mil 400 millones de pesos adicionales.