Al inaugurar el Centro de Transferencia Modal (Cetram) El Rosario, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera Espinosa, adelantó que este esquema se repetirá en otros paraderos de autobuses en la ciudad de México.

De entrada, el mandatario capitalino aseguró, ante inversionistas, empresarios e integrantes de su gabinete, que con esto cumplía otra de las promesas de campaña. Aunque el Cetram, incluida su zona comercial, opera desde diciembre de 2012.

Mancera Espinosa explicó que con esto se da un cambio a la estrategia de movilidad, la cual implica mejorar las zonas de conexión y transbordo del usuario, que sean lugares de calidad, con servicios, con señalización y accesos peatonales a los diferentes modos de transporte.

Detalló que el Cetram se hizo con un esquema de coinversión, en donde hay una concesión (por 30 años), donde hay inversionistas de la iniciativa privada que hacen una aportación muy importante; estamos hablando de más de 400 millones de pesos, cercanos a los 500 millones.

Aseguró que la afluencia de usuarios del Cetram El Rosario –que se estima en 220 mil al día– es tres veces mayor a la que se registra en el aeropuerto de la ciudad de México.

Aquí hay conectividad con seis delegaciones, con 19 municipios del estado de México. Estamos hablando de 2 mil o 2 mil 500 líneas que están convergiendo.

Por su parte, el presidente de Inmuebles de grupo Carso, Alfonso Salem Slim, dijo que se construyeron 80 locales, cinco andenes y 200 cajones de estacionamiento, y se generaron 500 empleos directos, mil 200 indirectos y 700 permanentes.

Tuvimos una inversión de 500 millones de pesos en esta primera etapa, informó.