e están cumpliendo cuatro décadas de que se sentaron las bases en Chile para que, en el intento de abrir las grandes alamedas, mediante la acción unida de la izquierda, en una organización múltiple que ya, en su conjunto, se llamó la izquierda unida
y su líder indiscutible, quien siendo médico de profesión, y dotado con una gran sensibilidad, se mantuvo durante toda su juventud, muy especialmente, cerca sobre todo con ciertos grupos sociales, por ejemplo los indígenas, que fueron deslazados desde la zona sur de los lagos hasta el extremo geográfico del territorio que se denominó Chile
, y que corresponde a una voz indígena, que no guarda ninguna relación con el significado que adquirió en México, nueve mil kilómetros al norte.
Salvador Allende se distinguía por sus grandes dotes de oratoria, las que lo destacaron como hombre de ideas político-sociales expresadas con claridad y precisión, y desde luego, con el apasionamiento tan característico de su personalidad, que lo llevó incluso, en varias ocasiones, a las cámaras legislativas, donde se expresó con gran claridad y firmeza, con lo que ganó también el liderazgo que lo distinguió, no únicamente en las cámaras de diputados y de senadores. Allende, se integraba con facilidad las dirigencias camerales, tanto como a los liderazgos del ambiente exterior, del mismo modo que se integraba a los grupos que se desempeñaban como líderes, en espacios mayores que se abocaban a la solución de los problemas que aquejaban a los grupos sociales, como los campesinos, los mineros, los pescadores, y desde luego ya se señalaban grupos interesados en desarrollar el turismo.
En las montañas de la precordillera, tanto como en la cordillera misma, y en algunos valles, se formaron yacimientos de cobre muy importantes, y fue así como también fueron objeto del interés de capitales nacionales y extranjeros los yacimientos cada vez más importantes, que han llegado a tener gran influencia en el mercado internacional del metal, el cual mantiene una importante influencia, no solamente en el territorio nacional, sino que también, como hemos dicho ya, influye de una manera definitiva en la configuración de los mercados internacionales de este material, que adquiere una gran influencia mundial en el mercado internacional. Este apreciado elemento, tan importante en la industria eléctrica, por ejemplo.
En lo que respecta a la relación política internacional, es muy probable también que en buena parte del mundo industrializado se sigan buscando opciones diferentes a los caminos sociales clásicos, que han señalado con exclusividad las rutas que los sindicatos modernos busquen y encuentren para mejorar un futuro, muy cercano, que les ofrecerá a los obreros y a los gobiernos, tanto como a los mismos dueños de los capitales, inversionistas, otras opciones de organización que no necesariamente pasen obligadamente por las viejas alternativas que se enfrentaron a principios del siglo pasado a versiones de las mismas características, que se plieguen a los mismos defectos, o a otros parecidos, que no resuelvan enteramente los vicios que se derivaron en el siglo XX, que impidieron que se desarrollara más, progresando lo suficiente, para que hagan posible el disfrute de los beneficios de la industrialización, sin que se enfrenten la fuerza de los trabajadores, con los beneficios que en un marco de justicia social, se permita el reparto justo de beneficios y utilidades, sin poner en riesgo el capital que permanezca trabajando y, por tanto, proporcionando beneficios a sus dueños legítimos y originales, sin que por ello se arriesgue innecesariamente, la legitimidad de la propiedad industrial.
En Chile, en la década de los 1970, hubo desconfianzas que finalmente se desarrollaron, con mucha sangre que tuvo que correr, y traiciones que jugar, y finalmente, aunque sí fue que el país se desarrolló, quedaron fuertes resentimientos, y profundas cicatrices que difícilmente se van a borrar, que no sabemos si los nuevos, los jóvenes, van a poder superar, y lograr materializar los ideales nobles y justos, de Salvador Allende, y de otras grandes figuras como Lázaro Cárdenas, que nos dejó a las actuales generaciones, también una grande y bella, qué realizar, en los yacimientos petroleros y en la industria del gas.
Que es un reto para los jóvenes ingenieros, que allí tienen varias modalidades de la ingeniería, para desarrollar en beneficio de México y de nuestros hijos y de nuestros nietos, y también de nuestros bisnietos (para octubre, yo voy a tener dos un hombre y una mujercita, ¿qué les parece?)