Unos rechazan obras; otros las apoyan
Lunes 20 de mayo de 2013, p. 32
Un proyecto para suministrar agua potable del sistema Cutzamala a una parte del pueblo de San Bartolo Ameyalco, en la delegación Álvaro Obregón, divide a los vecinos, pues mientras unos rechazan las obras, otros las apoyan.
La propuesta de la demarcación, dada a conocer hace un mes durante una reunión entre vecinos del poblado y representantes delegacionales en la que los primeros expusieron el problema de suministro de agua, consiste en la construcción de una línea de distribución paralela
a la existente en la zona para dotar de líquido proveniente del Cutzamala a las calles de Francisco I. Madero, Torres de Tepito, la zona de Ixtlahuaca, Moctezuma, Cañada, entre otras, las cuales sólo reciben agua en pipas.
Sin embargo, una parte de los habitantes –que se abastecen del líquido mediante un manantial del lugar– rechazaron las obras porque señalaron que este proyecto afectará la red que ocupan. No queremos que se mezclen las aguas
del manantial con las del Cutzamala”, dicen. Refieren que incluso el líquido que reciben podría ser desviado a otras partes de la delegación; por ello, desde el domingo pasado residentes de la calle Camino Viejo a Mixcoac mantienen un campamento en el tanque Zacamulpa para evitar el inicio de los trabajos que realizará la delegación.
Durante la asamblea general del pueblo realizada ayer y en la que algunos vecinos manifestaron su rechazo a la iniciativa delegacional, Silvia Zumaya Galicia, representante de la Comisión del Agua del comité vecinal, señaló que las autoridades delegacionales le explicaron que el proyecto era del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex); sin embargo, el organismo se deslindó mediante un oficio. Señalaron que según los usos de costumbres del pueblo, éste debe ser consultado y avalar las obras antes de iniciarlas, lo cual no sucedió.
Mientras, habitantes que no tienen agua, manifestaron su apoyo al proyecto delegacional, pues informaron que gastan entre mil 200 y mil 800 pesos cada 20 días en la compra de pipas y señalaron a la señora Zumaya de generar un enfrentamiento entre vecinos; pues en otras ocasiones les manifestó su apoyo para que ellos tengan acceso al líquido.