Falta voluntad política
para rechazar presiones de empresas: activista de EU
La enfermedad asociada al consumo de cigarros, primera causa de muerte prevenible
Domingo 12 de mayo de 2013, p. 34
México fue el primer país de América Latina en adherirse al Convenio Marco para el Control del Tabaco (CMCT), iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que en mayo cumple 10 años. Aunque puede dar cuenta de avances con medidas para desalentar el consumo, todavía son varios los asuntos pendientes e incluso los rezagos, afirmó Ch’uya Lane, integrante de proyectos de investigación en la región de la organización estadunidense Campaign for Tabacco-Free Kids.
Uno de los compromisos que México no ha cumplido son los espacios cien por ciento libres de humo de tabaco, con lo cual el país quedó atrás de por lo menos 14 naciones latinoamericanas que ya cuentan con leyes que prohíben fumar en los espacios públicos, indicó la activista.
La creación de la Ley General para el Control del Tabaco –en vigor a partir de agosto de 2008– fue un gran logro, pero acotado por la permisividad de las áreas para fumar. El CMCT es muy claro en este tema: dichos espacios simplemente no deben existir.
En entrevista, Lane también se refirió al obstáculo que representa la imposibilidad de que el monto del impuesto al consumo de productos del tabaco se actualice con base en el índice inflacionario. Cuando se instauró –en 2010–, los legisladores determinaron que fuera de siete pesos por cajetilla, pero al no prever el aumento anual, se empezó a rezagar y a perder el efecto de desalentar el consumo.
El CMCT es el primer tratado internacional en la materia. Fue creado por la Asamblea Mundial de la Salud el 21 de mayo de 2003 y entró en vigor el 27 de febrero de 2005. Tiene el objetivo de erradicar el tabaquismo, considerado epidemia de consecuencias graves para la salud y la vida. Se le asocia con diversas enfermedades y como la primera causa de muerte que se puede prevenir.
De acuerdo con la OMS, dicho acuerdo es uno de los que con mayor rapidez y amplitud han sido adoptados en la historia de Naciones Unidas, pues ratifica el derecho de las personas al goce del grado máximo de salud.
El documento contiene diversos compromisos adoptados por los países firmantes, principalmente la protección de los no fumadores, así como la disminución del impacto en los sistemas de salud, que actualmente enfrentan una alta demanda de servicios médicos por padecimientos como el cáncer y las afecciones cardiovasculares, entre otras, en su mayoría vinculadas al tabaquismo.
Tan sólo en México, la información oficial afirma que al año mueren más de 60 mil personas por causas relacionadas con esa adicción.
Lane resaltó que los rezagos que enfrenta México se deben a la falta de voluntad política del gobierno y los legisladores para rechazar las presiones de la industria tabacalera que por todos los medios busca obstaculizar la lucha contra el tabaquismo. Esa voluntad política, dijo, es la que explica que países como Uruguay, Panamá, Guatemala, Colombia, Trinidad y Tobago, Honduras, Barbados, Perú, Brasil, Argentina, Venezuela, Costa Rica y Chile hayan logrado garantizar los espacios libres de humo.
De cualquier forma, agregó Lane, México tiene oportunidad de seguir avanzando y cumplir sus compromisos, pues existen iniciativas de reforma a la ley, pendientes de ser aprobadas en el Congreso de la Unión.