La senadora priísta Cristina Díaz presentó una iniciativa de reforma para que quede asentada en la Ley Federal del Trabajo (LFT) la prohibición al trabajo de menores de 14 años en todo el país.

En su iniciativa de reformas y adiciones a LFT, la también presidenta de la Comisión de Gobernación del Senado solicitó que se precise en la ley que el término niño designa a toda persona menor de 14 años.

La senadora propuso que en dicho ordenamiento se definan las peores formas de trabajo infantil, que abarcan, entre otras, la utilización, reclutamiento u oferta de niños para la prostitución o pornografía; la utilización y reclutamiento de niños para actividades ilícitas, y todas las formas de esclavitud, como la venta y trata de niños, la servidumbre por deudas o el trabajo forzoso.

Refiere la senadora en la exposición de motivos de su iniciativa que los últimos datos publicados señalan que en el país hay 3 millones 647 mil 67 trabajadores de entre 5 y 17 años, de un total de 29 millones 203 mil 394 niñas y niños en ese mismo rango de edad, lo que significa que 12.5 por ciento de la población infantil está trabajando.

Advierte Díaz que una grieta en la legislación actual permite el trabajo desde los 14 años de edad, sin importar qué trabajo realiza el menor y sin limitación alguna para laborar, edad que no es recomendada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la cual es un factor determinante, ya que provoca que los niños que no han acabado su educación  básica entren a trabajar, y tal vez nunca dejen de hacerlo, renunciando a su derecho a la educación básica.

Detalla la senadora que, según la definición de trabajo infantil adoptada en el Módulo de Trabajo Infantil 2007, realizado por la OIT y el Unicef, son clasificados como trabajadores aquellos niños y niñas que han llevado a cabo una actividad económica, por lo que en los 3.6 millones de trabajadores infantiles del país no están incluidos quienes trataron de obtener algún ingreso cuidando automóviles en las calles, limpiando parabrisas en los cruceros, cantando en el transporte público u ofreciendo entretenimiento, como los niños tragafuego, los que se acuestan sobre cristales rotos o los payasitos, lo cual aumenta la cifra oficial de manera considerable.

Insistió Díaz en que 31 por ciento de todos los trabajadores infantiles de México, casi la tercera parte, “no tienen la edad mínima establecida por la Constitución y por la Ley Federal del Trabajo  para incorporarse a las actividades laborales.

Destacó que 35.5 por ciento de los trabajadores entre 5 y 17 años dedica un mínimo de 35 horas a la semana al trabajo, lo que significa un promedio de cinco horas diarias trabajando todos los días, o siete horas, si lo hacen de lunes a viernes; a esto se agrega que 14 de cada 100 niños y niñas que trabajan no tienen horario regular.