Lunes 6 de mayo de 2013, p. 25
Roma. Apenas acaba de tomar posesión el nuevo gobierno en Italia y el ex primer ministro Silvio Berlusconi ya amenazó con fracturarlo: en una entrevista en uno de sus canales de televisión, el magnate dijo que así lo hará si no se suprime el impuesto territorial IMU introducido durante el gobierno de Mario Monti. La coalición dirigida por Enrico Letta se formó a finales de abril, dos meses después de las elecciones parlamentarias de febrero, tras un largo bloqueo político ante lo ajustado de los resultados electorales. Berlusconi ya había condicionado la supresión del IMU al apoyo a Letta, que hasta ahora sólo prometió que congelará el mes próximo el pago hasta que se encuentre una solución. Según el diario Corriere della Sera la medida le costaría al endeudado país 15 mil 700 millones dólares. La Comisión Europea instó al nuevo gobierno italiano a cumplir sus obligaciones de ahorro asumidas con Europa.