Houston, 2 de mayo.

Un hombre murió durante un tiroteo en una de las terminales del aeropuerto internacional en Houston, Texas, en un nuevo incidente con armas de fuego ocurrido días después de que en Kentucky un niño de cinco años mató a su hermana, de dos, al dispararle con un rifle calibre 22 que el pequeño recibió como regalo de cumpleaños.

Un hombre, cuya identidad no ha sido revelada, intentó pasar armado por uno de los filtros de seguridad que controlan los accesos a las salas de espera de la terminal B del aeropuerto de Houston. Cuando el personal de seguridad trató de detenerlo, tomó el revólver que llevaba y se disparó. Una estación local de televisión reportó que el individuo realizó al menos dos disparos antes de suicidarse.

En este contexto, se informó que Caroline Starks, de dos años, murió el martes pasado de un disparo de rifle calibre 22 que le propinó su hermano con un arma diseñada para niños marca Cricket que sus padres no sabían que estaba cargado.

El pequeño, cuyo nombre no se dio a conocer, recibió el rifle como regalo el año pasado.

Gary White, forense del condado de Cumberland, señaló que la madre de los niños salió un momento de la casa cuando su hijo disparó. Dijo que no pasaron más de tres minutos cuando escuchó la detonación. Corrió a la casa y encontró a la pequeña, dijo White a medios locales.

En 2011 hubo 851 muertes accidentales por armas de fuego en Estados Unidos, según el último informe de la Agencia Federal de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.

Se suman 14 mil 675 personas que resultaron heridas por disparos accidentales, de las cuales 7 mil 991 eran menores de 18 años y 3 mil 569 eran menores de 13.

Estados Unidos se encuentra envuelto en un acalorado debate sobre el control de armas de fuego a raíz de una trágica balacera ocurrida en diciembre pasado en la escuela primaria Sandy Hook, en Newtown, Connecticut, en la cual murieron 20 niños y seis maestros.

En tanto, decenas de miles de miembros de la Asociación Nacional del Rifle (ANR) se preparan para una reunión en Houston este fin de semana por primera vez desde que el Senado rechazó el mes pasado un plan para ampliar la verificación de antecedentes a los compradores de armas, pero en la agrupación dicen que no se congregarán sólo para celebrar esta victoria.

El presidente Barack Obama ha presionado a los congresistas para aprobar legislaciones federales que impuslen un control de armas más estricto al exigir la verificación de antecedentes penales de los compradores, así como la prohibición de venta de armas de asalto como la utilizada por el atacante de Newtown.

Definitivamente no nos dormiremos en nuestros laureles, sostuvo Andre Aulandam, vocero de la ANR, en referencia al rechazo del mes pasado para reforzar el control de la venta de armas en Estados Unidos, al anunciar la reunión de este fin de semana en Houston –donde ocurrió el tiroteo de hoy–, y a la que se espera asistan unas 70 mil personas.

Encuestas muestran que más de 80 por ciento de estadunidenses apoya ampliar la verificación de antecedentes, pero la propuesta para extender esta medida a las ventas realizadas por Internet y a las ferias de armas no logró los 60 votos necesarios en el Senado.

La reunión de la ANR, que se realizará entre viernes y domingo, es una celebración de la Segunda Enmienda de la Constitución del país, que establece el derecho a portar armas.