Wael Halki condena el ataque en el que murieron seis personas
Martes 30 de abril de 2013, p. 35
Damasco, 29 de abril.
El primer ministro sirio, Wael Halki, resultó ileso hoy de un atentado con bomba en esta capital en el cual murieron seis personas, en el primer ataque contra un alto dirigente del régimen de Bashar Assad desde julio del año pasado.
Halki tiene escaso poder, pero el ataque destaca la creciente capacidad de los rebeldes de apuntar a símbolos de la autoridad de Assad.
El presidente sirio designó a Halki en agosto para remplazar a Riyadh Hijab, quien desertó y escapó a la vecina Jordania pocas semanas después de un bombazo en Damasco que provocó la muerte de cuatro de los asesores de seguridad más importantes del gobierno.
En comentarios publicados por la agencia estatal de noticias Sana, Halki condenó el ataque como un signo de decadencia y fracaso de los grupos terroristas
, en referencia a los rebeldes que luchan por derrocar a Assad.
La explosión sacudió el barrio Mezze y generó una densa columna de humo. El opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos con sede en Londres informó que uno de los guardaespaldas que acompañaban a Halki murió, al igual que cinco transeúntes. Otro de sus escoltas y el chofer del automóvil resultaron con heridas graves.
La televisión estatal mostró bomberos trabajando en el lugar, en medio de los restos del vehículo. Cerca había un gran autobús blanco con las ventanillas estrelladas y los asientos incendiados. Vidrios y escombros estaban esparcidos por la calle.
El secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, condenó el incidente en un comunicado.
El secretario general ha considerado constantemente todos los actos de terrorismo y sigue extremadamente preocupado por la continua escalada de violencia en Siria, donde los civiles son asesinados, heridos, detenidos y secuestrados cada día
, según el texto.
Por otro lado, el gobierno de Assad prepara medidas contra el robo de petróleo y su venta a países vecinos, en respuesta a la decisión de la Unión Europea de autorizar las importaciones de crudo de las zonas controladas por los opositores armados.