Obtienen el primer lugar en el certamen literario Cuéntame tu aventura en el Metro
directores por un díadel STC
Fernanda propone mayor limpieza y vigilancia
Ian dice que prefiere vagones de colores
Martes 30 de abril de 2013, p. 42
Minutos antes del mediodía, Ian Mario Pérez Pérez Negrón, de seis años, y María Fernanda Blas López, de 12, esperaban el paso del tren en la estación Salto del Agua del Metro en dirección a la terminal Observatorio. Apenas se detuvo el convoy, y ante la sorpresa de algunos usuarios, ambos abordaron la cabina del conductor para realizar un recorrido hasta la estación Insurgentes, como parte de sus actividades como directores del Metro por un día
, tras la ceremonia de premiación del concurso de ensayo Cuéntame tu aventura en el Metro, en el que ambos obtuvieron el primer lugar.
Ella ataviada con un traje gris y él con un traje negro comenzaron las actividades en su calidad de directores generales
desde temprano, pues presidieron la reunión del Consejo del Metro, además de que visitaron el Puesto Central de Control 1, donde recibieron una explicación detallada sobre el funcionamiento del cerebro
de este transporte, al igual que durante el recorrido del convoy.
Los conductores tienen muchas cosas qué hacer. Pensaba que nada más era una palanquita para frenar, pero son demasiados botones
, dijo Fernanda al ser entrevistada al término del recorrido. Propuso mayor limpieza y vigilancia para evitar que pasajeros rayen las ventanas de los vagones. Ian señaló que prefiere vagones de colores
.
Durante sus actividades como directores por un día
y enmarcadas en las celebraciones del Día del Niño, los dos menores estuvieron acompañados por Joel Ortega Cuevas, director general del Sistema de Transporte Colectivo, quien destacó la importancia de que los niños, nuestros siguientes usuarios, se vayan vinculando con el sistema (de transporte)
, el cual traslada más de 5.1 millones de personas por día, por lo cual se organizó el concurso literario.
A diferencia de Ian Mario, quien para participar describió la pérdida de su Carro rojo con una llanta atrás
en las vías de la estación Hidalgo del Metro, en la línea 2, porque cuando por fin logramos subir al tren choqué con un señor gordito y chaparrito y mi carrito rojo se me soltó de mi mano
; Fernanda señaló que por el Metro inició una amistad
.
Un día, saliendo de la escuela escuché una voz que me gritaba Feeer, ¿te vas a ir caminando?
–Sí, le dije a Camila, mi compañera de clase.
–No tengo dinero para el boleto –me dijo.
–Ay, amiga… vente, yo te pago tu pasaje, para eso estamos los amigos –dijo durante la lectura de su trabajo, con el cual se hizo acreedora a una computadora.
Ortega Cuevas destacó que se recibieron más de 200 textos, donde los ganadores del segundo hasta el quinto lugar recibieron un diploma y una bicicleta cada uno.