Una juez en Nueva York rechazó una porción sustancial
de las demandas privadas
Domingo 31 de marzo de 2013, p. 20
Nueva York, 30 de marzo.
Los bancos más grandes del mundo lograron una victoria sobre las acusaciones respecto a la manipulación de la tasa bancaria Libor. Una juez de Estados Unidos rechazó una porción sustancial
de las demandas privadas que los acusan de manipular un índice mundial de tasas de interés.
Los 16 bancos han enfrentado demandas por miles de millones de dólares en el caso considerado como una de las mayores amenazas legales que han enfrentado, además de las investigaciones que realizan reguladores en Estados Unidos, Europa y Reino Unido.
Las acusaciones incluyen a bancos como Bank of America, Citigroup, Credit Suisse, Deutsche Bank, HSBC Holdings PLC, JPMorgan Chase, Royal Bank of Canada, Royal Bank of Scotland y WestLB, que han sido demandados por diversas instancias privadas, acusadas de conspirar para manipular la tasa de interés interbancaria del mercado de Londres (Libor), un índice clave para más de 550 billones de dólares en productos financieros. La tasa Libor tiene reprecusiones en toda la esfera financiera y sirve también para referencia indirecta en los préstamos a hogares y empresas.
Varias entidades financieras estadunidenses, además de los estados de Nueva York y Connecticut, denunciaron ante la justicia haber sido perjudicados por la manipulación de la tasa.
En un significativo revés para los demandantes, la jueza de distrito en Manhattan, Naomi Reice Buchwald, aceptó la moción de los bancos de rechazar los reclamos federales antimonopolios y descartó parcialmente las quejas de los demandantes de manipulación de materias primas, también desestimó las demandas por fraude y leyes estatales.
Buchwald permitió que continúe la parte de la demanda que sostiene que la supuesta manipulación de la tasa Libor por los bancos perjudicó a operadores que apostaban al cambio de la tasa de interés. Los pequeños movimientos en esas tasas pueden significar grandes ganancias o pérdidas para quienes apuestan a la dirección del movimiento del referencial.
El fallo se da en momentos en que la industria bancaria enfrenta demandas legales y de los reguladores en múltiples frentes, incluidos cómo crearon y vendieron préstamos hipotecarios, así como preguntas sobre si algunos se han vuelto tan grandes como para representar un riesgo al sistema financiero global.