Londres, 26 de marzo.

La actriz italiana Gina Lollobrigida, uno de los símbolos sexuales de las décadas de 1950 y 1960, venderá parte de sus joyas para recaudar fondos para la investigación sobre células madres. Afirmó que es el momento de devolver parte de lo que la vida le ha dado.

Tras una infancia rural y humilde, Lollobrigida trabajó en el cine junto a estrellas de Hollywood como Humphrey Bogart, Rock Hudson, Burt Lancaster, Tony Curtis y Frank Sinatra.

A medida que su carrera despegaba en Francia, Italia y Hollywood, Lollobrigida comenzó a coleccionar joyas de Bulgari, las cuales siempre compró ella misma con el dinero que le proporcionaba su trabajo.

Lollobrigida, de 85 años, dejó la actuación en la década de 1980 e incursionó en el fotoperiodismo, las labores humanitarias y la escultura, y ahora considera que es el momento de dar a las joyas un buen uso.

Algunas de las 22 joyas de su colección se subastarán en Sotheby’s, en Ginebra, el 14 de mayo, tras ser expuestas en Londres, Nueva York y Roma.

Lollobrigida dijo que donará lo recaudado a un fondo para crear un hospital que investigue con células madres.

Misión importante

No será el fin de las joyas, sino algo que haga bien, al ayudar a una causa importante para mí, dijo en entrevista telefónica desde Roma.

Quiero dejar un recuerdo de mi vida, agregó.

Las piezas incluyen un par de pendientes de perla y diamantes hechos en 1964, por los que se espera obtener hasta un millón de dólares; un anillo de diamantes de 19 quilates de aproximadamente el mismo precio y un juego de collar y pulsera de diamantes de 1954 valorado en 500 mil dólares.

Detalle del collar de diamantes que hace juego con una pulsera, realizado por Bulgari en 1954Foto Reuters

También va a vender un par de pendientes de diamantes y esmeraldas con los que fue fotografiada una noche de 1965 con Salvador Dalí, que se espera que alcancen los 250 mil dólares.

Lollobrigida, quien era estudiante de una Academia de Bellas Artes en Roma antes de ser descubierta en un concurso de belleza por el director de cine italiano Vittorio de Sica, dijo que ahora pasa su tiempo con la escultura y necesita poco las joyas. En el decenio pasado expuso su obra en Moscú, París y Venecia.

La ex actriz dijo que el arte siempre fue su sueño, pero que terminó actuando por casualidad. Entre sus películas se encuentran Salomón y la reina de Shaba y Cuando llegue septiembre.

Actuar no era mi deseo, pero al final el destino hizo que me dedicara a ello, dijo.

Fue una experiencia interesante y sin el dinero no podría hacer lo que me gusta, que es la escultura. Hacer algo en la vida, no sólo ganar dinero, sino también disfrutar de la vida, esa es la riqueza de mi vida. Soy afortunada de poder hacerlo, afirmó.

Lollobrigida, quien se casó una vez y tuvo un hijo, cayó en un extraño complot de matrimonio en 2010, relacionado con su patrimonio, que aún está en litigio. Presentó una denuncia ante la policía de Roma respecto de su ex novio Javier Rigau y Rafols, de 51 años, empresario español que insistía en que se había casado legítimamente con ella, aunque la actriz afirmaba que no estuvo presente en la ceremonia.

No hubo matrimonio y fue una historia muy desagradable. Desafortunadamente, habrá un final feliz, sorprendente, dijo Lollobrigida. Estoy muy contenta de que esto haya acabado prácticamente, concluyó.