Martes 26 de marzo de 2013, p. 19
Nueva York. Más de 100 países se quejaron ayer en la Organización de Naciones Unidas (ONU) porque las conversaciones sobre un tratado de comercio de armas convencionales van hacia atrás
, pese a un compromiso anterior para regular esa actividad, que mueve 80 mil millones de dólares anuales. Estados Unidos, Rusia, Francia, Alemania, Gran Bretaña y China, los mayores fabricantes de armamento, buscan un acuerdo que no amenace sus industrias e intereses. Los grupos de presión no gubernamentales dicen que las potencias de Occidente tratan de alivianar
el tratado para que lo firmen los mayores fabricantes.