partir del 7 y hasta el 10 de marzo, como es costumbre, se iniciaran los festejos del 27 Encuentro Nacional de Mujeres en el Arte, donde se llevarán a cabo una serie de reconocimientos a mujeres que se han distinguido por su aportación en diferentes disciplinas artísticas. Cabe señalar la incesante labor de la maestra Socorro Bastida y de la maestra Evangelina Villalón, quienes asimismo desarrollaron una notoria actividad en el terreno de la danza clásica una, y contemporánea la otra, como intérpretes e integrantes de importantes compañías nacionales de prestigio.

Estos encuentros, siempre apoyados por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes con la participación directiva de Leticia Armijo, compositora de renombre, ya han sembrado una tradición que se encarga de luchar contra el olvido, la indiferencia o el acaparamiento de méritos en determinados círculos, olvidando las valiosas aportaciones que infinidad de artistas, maestras, bailarinas y promotoras de la danza han realizado desde siempre, por lo que no es ingrato que poco a poco se dé a conocer la tenacidad y el valor de toda esa gente que ha entregado su vida a la danza, en la mayoría de los casos sin el aliciente de sueldos o premios en efectivo como se hace en otras distinciones a los artistas.

Como bien se sabe, el reconocimiento, respeto y alicientes para este tipo de actividades resulta muy meritorio y saludable, pues de algún modo se reparte algo del presupuesto oficial a los trabajadores del arte, aunque a veces ni están los que son ni son los que están, quién sabe si por favoritismo o simple ignorancia, digamos falta de información, pues, como bien se sabe, algunos homenajes desentonan con la realidad, es decir, les queda grande o chico el reconocimiento, como ha sucedido en el caso del enorme poeta Rubén Bonifaz Nuño, hombre de letras, escritor estudioso y preocupado, con suficientes traducciones del griego y latín publicados en colecciones especializadas de gran erudición, labor intelectual abundante y a la vista, que falleció recientemente y no recibió el homenaje póstumo en el inefable Palacio de Bellas Artes, el cual esperamos se realice próximamente, como merece.

Así, podría decirse que Bellas Artes es para todo y para todos, en una especie de democratización confusa y extraña, que simplemente desentona; evidentemente se trata de falta de información, pues para todo hay lugares apropiados dignos y de gran abolengo cultural y artístico.

Así pues, en el Teatro de la Danza se presentarán en el 27 Encuentro Nacional de Mujeres en el Arte, los días 7, 8, 9 y 10 de marzo, a las 20 y 19 horas, las compañías Nacional de Danza, Murmullo de Sirenas –a cargo de la maestra Villalón y Bastida–, la Escuela Nacional de Danza Nellie y Gloria Campobello, y el Ballet Folclórico de Danza Mexicana de Silvia Lozano, así como una exposición fotográfica de Joaquín y Ximena Guzmán en honor a la maestra Clara Carranco, cuya amplísima trayectoria y prestigio son de todos conocidos, y por cuyos méritos recibirá el premio Coatlicue próximamente en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes. Consulte cartelera.