Presentan resultados del estudio EDGE, realizado en 27 países
Viernes 1º de marzo de 2013, p. 46
México ocupa el séptimo lugar a escala mundial en diabetes mellitus tipo 2 y quienes la padecen gastan entre dos y cinco veces más que el resto de las personas, en detrimento de su economía, advirtió la Federación Mexicana de Diabetes.
Al participar en la presentación del estudio EDGE, realizado por un laboratorio farmacéutico en 27 países, Gisela Ayala, presidenta de dicha organización indicó que cifras de la Federación Internacional de Diabetes refieren que la prevalencia del padecimiento es de 15.5 por ciento, y que en México existen 2.6 millones de prediabéticos y 10. 6 millones de pacientes diabéticos.
Advirtió que el mayor problema es la falta de control de la enfermedad, pues la mitad de las personas que viven con ella no lo saben y acuden al médico en fases avanzadas, lo cual genera que se invierta entre 4 y 5 por ciento del presupuesto en salud en atender complicaciones por diabetes.
La investigación, en la que participaron cerca de tres mil 800 pacientes y 200 investigadores mexicanos y realizada por Novartis, arrojó que un problema en el país es que la mayoría de las personas con diabetes inician su tratamiento a los 56 años y toman el mismo medicamento cerca de seis años, aunque no obtengan resultados óptimos.
El estudio fue aplicado en hospitales públicos y privados de todo el país, con el propósito de contar con medicina basada en evidencia local, fundamental para valorar la prescripción del paciente con diabetes de manera particular
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También demostró que las terapias combinadas son más efectivas, sólo disponibles en nosocomios privados y en algunos hospitales del sector público, como los de las secretarías de la Defensa Nacional y de Marina, así como en el de Petróleos Mexicanos.
Graciela Alexanderson, integrante de la Asociación Latinoamericana de Diabetes, explicó que la diabetes tipo 2 es una enfermedad progresiva en la que cada vez resulta más difícil el control de los niveles de glucosa con un solo tratamiento.
La también secretaria general del Consejo Mexicano de Medicina Interna añadió que si bien la obesidad es un factor que favorece el desarrollo de la diabetes, en México existe una predisposición genética, lo que demanda implementar acciones que ayuden a mejorar los índices de detección de la enfermedad.
Ayala subrayó el papel de la educación para mejorar los estilos de vida, incluida la dieta diaria y la realización de actividad física al menos cinco veces a la semana por 30 minutos.
La Federación Mexicana de Diabetes celebrará su Congreso Nacional en León, Guanajuato.