Es complicado regresar y ya no ser campeón; la gente da por terminada tu carrera, por ser peleador veterano. Sin embargo, uno debe tener confianza en que se tiene la capacidad para retornar a los triunfos, dice Édgar Sosa, ex monarca mundial minimosca.

Luego de perder su título en 2009 ante el filipino Rodel Mayol, Sosa está a un paso de regresar a la gloria del boxeo, sólo debe imponerse el sábado 9 de marzo en Guadalajara a Ulises Archie Solís, en una contienda por el cinturón plata mosca del CMB, que a su vez es el boleto para disputar el cetro mundial de la categoría, actualmente en manos del japonés Toshiyuki Igarashi.

Quiero demostrar a la gente que estoy vigente, quiero ser campeón mundial y sé que lo puedo hacer. A veces, como peleador, las cosas no se te dan como quisieras, pero se tiene el hambre de triunfo y, como decimos, también hay que salir por la chuleta, hay que echar todas las ganas y no desmotivarte, indica.

Resalta que perder su cetro y tener que recorrer nuevamente el camino al triunfo no fue en balde porque no regresas desde cero, regresas con experiencia, y eso no lo puedes comprar en la farmacia.

El púgil capitalino confiesa que esta pelea también es una oportunidad para revertir el resultado de dos batallas anteriores donde cayó frente a Archie, la primera en mayo de 2001, cuando el tapatío le quitó el invicto, y la segunda en septiembre de 2003 cuando disputaron el título nacional minimosca.

No perderé, tengo gran condición física y estoy concentrado. Los dos somos boxeadores de experiencia, con técnica, gran pegada y vengo enrachado con cuatro triunfos, eso es un plus, advierte.

A sus 33 años y con un récord de 47 victorias en 54 enfrentamientos, Sosa no tiene en mente tocar la lona el 9 de marzo y mucho menos piensa en el retiro en caso de no salir con la mano en alto, pues recuerda el logro de Juan Manuel Márquez, que a sus 39 años noqueó a Manny Pacquiao.

Desistir no pasa por mi cabeza; tengo el objetivo de ser campeón mundial este año. Las peleas se ganan aquí en el gimnasio, cuando te cuidas abajo del ring, y yo tomo a Márquez como ejemplo, un veterano de grandes batallas que se mantiene porque se dedica en cuerpo y alma al boxeo, señala.

Con gran firmeza y motivación de regresar a la élite en el deporte de las 16 cuerdas, el ex campeón deja en claro que en Guadalajara, arriba del ring, habrá una guerra; estoy seguro de que voy a ganar, la tercera es la vencida. Tengo buen golpeo, y voy a demostrar que hay más Édgar Sosa.