Barcelona, 27 de febrero.

El volante Andrés Iniesta realizó hoy una autocrítica tras la derrota del Barcelona en el clásico y reconoció que cuando las cosas no salen bien es que hay algo que falla. No podemos caer en el error de que todo es de fuera, mientras que el argentino Lionel Messi no entrenó por un proceso febril y malestar general por el que los médicos del club lo visitaron en su domicilio.

Admitió que tras lo de ayer, estamos jodidos, claro. Poco más se puede decir. El sábado, otra batalla, dijo rumbo al encuentro de liga, otra vez ante los Merengues.

En la previa del partido ante el Real Madrid (3-1 para los blancos), se habló mucho de árbitros y otras circunstancias externas que Iniesta desestimó, al entender que el equipo necesita analizar sus propios errores e instó a pensar en las cosas que el equipo no está haciendo bien para mejorar.

El mediocampista también reconoció que la ausencia por enfermedad de Tito Vilanova afecta al equipo. “Sería una mentira si dijese que no nos perjudica, es normal y lógico al no tener a la figura del primer entrenador. Me consta que el contacto con el Míster se hace de la mejor forma posible”, dijo sobre el papel de Vilanova y la dirección provisional de su ayudante, Jordi Roura.

Y pidió una reacción el 12 de marzo ante el Milán para intentar remontar y pasar la eliminatoria de Liga de Campeones, con ventaja provisional italiana por 2-0.

Hay que plantear el partido como una final. Tendremos que salir desde el minuto uno como si nos fuera la vida, dijo y rechazó que la baja de juego de Messi sea la clave de los recientes malos resultados. Es una cuestión de equipo, estamos fastidiados y hay que mejorar, insistió.

En dos partidos ante rivales de muchísimo nivel, el equipo no ha estado bien ni defensa ni ataque. Cuando el grupo funciona es cuando el engranaje funciona bien. Si fallan algunos aspectos, sufrimos más de la cuenta. Disfrutamos con el balón y cuando nos faltan cosas lo pasamos mal, observó.