Integrantes del Tribunal Permanente de los Pueblos (TPP) anunciaron la realización de la Semana Nacional contra la Violencia Represiva del Estado, con la finalidad de fortalecer en conjunto el proceso que permita demandar con fundamentos sólidos al Estado mexicano por las graves violaciones a los derechos humanos en contra del pueblo’’.

En conferencia de prensa, Nadín Reyes Maldonado, integrante de la Audiencia de Guerra Sucia, Violencia, Impunidad y Falta de Acceso a la Justicia; Héctor Cerezo, del Comité Cerezo México, así como Carlos Fazio y Gilberto López y Rivas, coincidieron en señalar que la nueva administración encabezada por Enrique Peña Nieto, sólo ha realizado cambios en el discurso, pues la reconfiguración de la estrategia de seguridad continúa prácticamente sin cambios sustanciales, y apuntaron que ante esta situación no se espera un cese del atropello de los derechos humanos en este entorno de violencia.

Precisaron que entre los temas que se abordarán esta semana están el proceso de militarización y paramilitarización, la práctica sistemática de la tortura, las detenciones ilegales, las desapariciones forzadas, las ejecuciones sumarias y extrajudiciales, la prisión por motivos políticos y la criminalización de la protesta social, entre otras violaciones a las garantías individuales. Afirmaron que durante el sexenio de Felipe Calderón ‘‘558 defensores de los derechos humanos fueron detenidos arbitrariamente, 49 fueron ejecutados de manera extrajudicial y 56 sufrieron desaparición forzada.

En cuanto a los grupos de autodefensa, el articulista de este periódico Gilberto López y Rivas llamó a no confundir este tipo de organizaciones con el paramilitarismo, pues dijo que la principal característica de este último es que sirven y están organizados por el Estado. En cambio, las policías comunitarias ‘‘son una cosa totalmente diferente’’, pues se han organizado ante la incapacidad de los gobiernos para brindar seguridad a la población.

El también garante del TPP (capítulo México) agregó que diversos analistas coinciden en afirmar que los cambios en la estrategia anticrimen de la administración federal son solamente ‘‘cosméticos’’ y sobre ello Héctor Cerezo apuntó que ‘‘sólo hay cambio de discurso y maquillaje’’, y lamentó que el nivel de violencia sea prácticamente el mismo que el sexenio anterior y se abone con un resurgimiento del paramilitarismo y de las agresiones a los activistas.

Nadín Reyes Maldonado dijo a su vez que persisten las ‘‘desapariciones de defensores de derechos humanos’’, y comentó que en lo que va de este sexenio tienen identificadas ‘‘alrededor de cinco’’ desapariciones.

En su turno, el columnista de La Jornada Carlos Fazio, quien también es participante de la Audiiencia de Guerra Sucia, Violencia e Impunidad lamentó la prevalencia de las ‘‘desapariciones forzadas, la tortura sistemática, las ejecuciones sumarias extrajudiciales’’, lo cual, dijo, ‘‘se da en el contexto de que agentes estatales, de la Marina, del Ejército y de las distintas policías son quienes han cometido esta clase de crímenes, con independencia de lo que ocurre en el rubro de la criminalidad per se’’.

Subrayó: ‘‘No podemos explicarnos esta represión continuada bajo estas distintas modalidades que configuran una guerra en contra el pueblo, sin ver que estos últimos 50 años la represión está combinada con los distintos modelos económicos de explotación del Estado mexicano a través de los sucesivos gobiernos de los partidos PRI y del PAN’’.