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El lenguaje contemporáneo le va bien al arpa: Mercedes Gómez
 
Periódico La Jornada
Sábado 16 de febrero de 2013, p. 4

La imagen dulce y romántica que prevalece sobre el arpa es sólo un cliché, señala Mercedes Gómez, pues es un instrumento que se hermana muy bien con el lenguaje contemporáneo.

Ejemplo de ello, menciona, es el Concierto para dos arpas y orquesta de Armando Luna que será interpretado hoy y mañana por la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM), en el que la arpista será solista al lado de su colega Janet Paulus, con quien integra el dúo Sondos.

A partir de los años 90 (del siglo pasado), el interés por el arpa en México ha ido aumentado; cada vez son más los compositores que crean obra para ella, así como el número de intérpretes, indica en entrevista.

Es un instrumento muy expresivo y con enormes capacidades de colores, entonces al lenguaje contemporáneo le va muy bien; permite mucha libertad a los compositores, casi pueden crear sus propias reglas.

Al respecto, retoma esa obra del autor mexicano, a la que describe como una pieza poco convencional, en la que el arpa no aparece como el típico instrumento romántico, sino con un espíritu muy contemporáneo. Ello, agrega, debido a que el compositor emplea sonoridades disonantes, muy distintas a aquellas con las que es identificado un concierto de arpa.

Es una obra muy difícil, requiere de mucho estudio y memoria muscular. Tiene saltos que son medio incómodos para el arpa, además de que utiliza recursos poco comunes, como golpes en la tapa de resonancia, explica Mercedes Gómez.

Dejarse llevar por la fantasía

Armando Luna escribió este concierto a partir de un encargo Sondos. Su estreno mundial fue en mayo de 2010, con el ensamble y la Orquesta Sinfónica Nacional.

Con duración de unos 25 minutos, consta de 11 pequeños movimientos en los que el autor da muestras de su conocimiento de la historia musical, así como de su sentido del humor, al recurrir a estructuras del barroco, del tango, del rock, del son jarocho y la música contemporánea, precisa.

“Es una música muy juguetona y una invitación a no tener prejuicios, a dejarse llevar por la fantasía –resalta–. Existe el cliché de que el arpa es dulce y romántica, y aquí es todo lo contrario.”

Los conciertos –donde se interpretarán Sinfonía de instrumentos de viento y Sinfonía en tres movimientos de Stravinsky– serán hoy a las 18 horas y el domingo a las 12:30, en la sala Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli (Periférico Sur 5141, colonia Isidro Fabela).