Las iglesias defienden la legalización de los emigrados
viven en la sombra
Lunes 11 de febrero de 2013, p. 42
La arquidiócesis de México señaló ayer que Estados Unidos tiene una enorme deuda humanitaria: la reforma migratoria, que podría beneficiar a más de 11 millones de inmigrantes que viven en la sombra
, privados de mínima seguridad laboral, de permanencia, de servicios sanitarios y de sus derechos humanos.
Indicó que las iglesias evangélicas en ese país, en conjunto con la Iglesia católica en México, defienden la legalización de los indocumentados y le dan una entusiasta bienvenida a esta reforma que pretende ser integral, y que no puede quedar atorada por la oposición racista y xenofóbica de algunos legisladores de ese país
. Máxime cuando la encuesta Gallup, publicada esta semana, demuestra que 72 por ciento de los ciudadanos estadunidenses votarían en favor de la propuesta del presidente Barack Obama.
Agregó que aunque no se pueden echar las campanas al vuelo, hay un motivo sólido que aviva la esperanza de alcanzar esta inaplazable reforma. Lo que sorprende es la nula reacción del gobierno de México
, dijo. Si bien es asunto interno del vecino país del norte, el Estado mexicano no puede permanecer indiferente, dado que son millones los connacionales que sufren esta situación de indefensión.
¿Acaso esta indiferencia y apatía de la clase gobernante y políticos de este país es porque nuestros hermanos inmigrantes no les brindan el voto y por lo mismo carecen de interés para ellos?
, cuestiona la arquidiócesis.
Los sistemas de representación están muy cuestionados: Rivera
En la homilía de ayer en la Catedral Metropolitana el cardenal Norberto Rivera Carrera dijo que en el mundo entero se vive un momento privilegiado de transición, donde los sistemas de representación están siendo fuertemente cuestionados y en donde se están proponiendo mecanismos de participación directa.
La gente está cansada de ser representada por otros, de dejar que otros tomen las decisiones que a ellos les corresponden. Es un momento privilegiado para apreciar la estructura de la Iglesia, que no puede ser entendida ni como monarquía ni como democracia, sino como comunión, una comunión que supone participación directa en la vida de Cristo
, expuso.
El arzobispo primado de México se reunió ayer con los 35 campaneros de la Catedral Metropolitana, los cuales le entregaron una serie de propuestas y hablaron del trabajo que realizan y, además, expresaron que continúan las visitas guiadas a las torres de esta iglesia para conocer sus catacumbas y el camapanario.