Aborda libro Obesidad en México recomendaciones sobre acciones públicas en salud
Una capacidad regional de atención de 3,500 personas al año no logrará abatir padecimientos
Jueves 7 de febrero de 2013, p. 45
Las unidades de especialidades médicas (Unemes) que atienden enfermedades crónicas son insuficientes para garantizar la prevención, detección temprana y control de males como la diabetes, hipertensión arterial y dislipidemias. Con una capacidad regional de atención de 3 mil 500 personas por año, no se logrará el objetivo de abatir la obesidad en México, advirtieron expertos de diferentes instituciones de salud y de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Subrayaron la importancia de contar con una estrategia integral y efectiva para enfrentar un fenómeno que ha tenido en el país uno de los crecimientos más rápidos del mundo, de tal suerte que en la actualidad, el sobrepeso y la obesidad afectan a 70 por ciento de los adultos y una tercera parte de los niños.
Dicho incremento ha tenido un impacto económico significativo. Investigaciones científicas calcularon en 67 mil millones de pesos los costos directos de la obesidad. De ese monto, 42 mil millones de pesos fueron absorbidos por el sistema nacional de salud y sólo por la atención de 14 complicaciones derivadas de la diabetes, las enfermedades cardiovasculares, el cáncer de mama y la osteoartritis.
Otros 25 mil millones de pesos representan el costo indirecto por pérdida de productividad de los afectados.
Para el año 2017 se estima que el costo directo ascienda a entre 78 mil millones y 101 mil millones de pesos de 2008, mientras el indirecto iría de 73 mil millones a 101 mil millones.
De manera paralela al crecimiento de obesidad, entre 1980 y 2000 se ha dado en el país el aumento de 47 por ciento en la mortalidad por diabetes mellitus tipo 2, con lo que este mal pasó de ser la novena causa de defunción a la segunda en 2010, señalaron los investigadores.
Si bien reconocen que el abordaje del problema debe ser integral, multidisciplinario, transectorial e involucrar a los diferentes órdenes de gobierno, desde el ámbito de la salud una política exitosa debe incluir que en las unidades de salud se realicen actividades como medir de manera sistemática los niveles de glucosa, presión arterial y lípidos en ayuno a las personas con exceso de peso corporal, las cuales están en alto riesgo de desarrollar padecimientos como los señalados.
Las acciones públicas tendrían que involucrar, incluso al ámbito privado, a fin de que las aseguradoras incluyan en sus beneficios la detección y tratamiento oportuno de enfermedades. Asimismo, las pólizas deberían cubrir de manera obligatoria el tratamiento de la obesidad.
En el libro Obesidad en México: recomendaciones para una política de Estado, los investigadores de los institutos nacionales de Salud Pública, de Ciencias Médicas y Nutrición y de la UNAM, abordaron el tema desde diversas perspectivas.