Nueva Delhi, 5 de febrero. El juicio a cinco hombres acusados de violar en grupo y asesinar a una joven en un autobús en Nueva Delhi comenzó este martes con el testimonio a puerta cerrada del novio de la víctima, quien compareció en la sala en silla de ruedas, convaleciente de las heridas sufridas en el ataque.

El ingeniero informático de 28 años, que no puede ser identificado por razones legales, es el principal testigo de la fiscalía en un caso que desató protestas en todo el país y un intenso debate sobre la delincuencia descontrolada contra las mujeres en India y una legislación más dura para los casos de violación.

Los cinco acusados son Vinay Sharma, empleado de un gimnasio; Ram Singh, el conductor del autobús; su hermano Mukesh Singh; el limpiador del vehículo Akshay Kumar Singh, y el frutero Pawan Kumar. Todos se han declarado inocentes de los delitos de violación y asesinato. Además, hay un sexto acusado, menor de edad, que es juzgado en otro tribunal.

Según la policía, los seis atacaron a la estudiante de fisioterapia, de 23 años, y a su novio en el autobús en el que ambos volvían a casa después de ir al cine el 16 de diciembre.

La mujer fue violada repetidamente y agredida con una barra metálica. Ambos fueron golpeados antes de ser arrojados a una carretera. La joven murió dos semanas después en un hospital de Singapur a consecuencia de las heridas internas.

Su padre hizo una comparecencia inesperada en una rueda de prensa organizada por el principal partido de la oposición, Bharatiya Janata Party (BJP), en la que pidió que los agresores fueran ahorcados. Durante la sesión, el novio, los abogados de la defensa y algunos policías salieron de la sala a un patio en el que estaba estacionado el vehículo en el que ocurrió el ataque.

En su declaración a la policía tras el asalto, el novio dijo que los atacantes le preguntaron ¿a dónde vas con una chica tan tarde por la noche?, antes de lanzarse a un furioso ataque.

La fiscalía informó que en los cateos a las viviendas de los acusados se encontraron objetos robados a la pareja, como sus teléfonos celulares, anillos y tarjetas de crédito. Entre el material que sirve de evidencia en el caso también hay prendas de ropa manchadas de sangre y diversos objetos de los que se han podido obtener pruebas de ADN.