Alumnos de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto Politécnico Nacional (IPN) enriquecieron bollos y medias noches (panes que se utilizan para preparar hamburguesas y hot dogs) con harina de brócoli –alimento con propiedades anticancerígenas y grandes cantidades de nutrientes–, con el propósito de que la comida rápida –de alto consumo en México– sea nutritiva.

El brócoli es una crucífera reconocida por la comunidad científica por su acción preventiva sobre el cáncer de colon y la anemia, debido a su alto contenido de hierro; además, aporta fitonutrientes, vitaminas C y E y minerales como calcio.

Pese a su alto valor nutrimental, el brócoli se consume poco en México, por lo que estudiantes de la carrera de ingeniería bioquímica decidieron utilizarlo, informó el IPN en un comunicado.

Incorporar el brócoli deshidratado a la harina de trigo tradicional fue un proceso que conllevó diversas pruebas, debido a que fue necesario estandarizar la fórmula para integrar las cantidades adecuadas de los ingredientes para obtener un producto final con una textura y consistencia agradables al paladar.

Los panes fueron elaborados en la planta de cereales de la ENCB y no se descarta la posibilidad de producirlos en mayor escala. El grupo de trabajo está integrado por Connie Marisol Chávez Rodríguez, José Alberto Esquivel Alarcón y Diana Elizabeth Ruiz Alonso, con la asesoría del profesor Salvador Bedolla Bernal.