La segunda prioridad es aumentar el crecimiento económico, destaca consultora Deloitte
Sobre las reformas pendientes en el país, 78% ubica a la hacendaria como la de mayor interés
Miércoles 23 de enero de 2013, p. 11
Para los empresarios mexicanos, la prioridad número uno es reducir la inseguridad.
De acuerdo con un sondeo levantado por la consultora Deloitte entre altos directivos de las firmas más importantes de México, 70 por ciento de los encuestados contempla el tema de inseguridad como el más relevante, seguido por el de mayor crecimiento económico.
Pese a la recién anunciada Cruzada Nacional contra el Hambre, el tema de la reducción de la pobreza quedó en tercer lugar de las prioridades empresariales, aunque la encuesta se hizo entre noviembre y diciembre de 2012.
Al presentar los resultados de la vigésima cuarta edición del Barómetro de Empresas correspondiente al cuarto trimestre de 2012, Deloitte México dijo que los empresarios tienen una percepción optimista respecto del entorno de negocios para este año. La situación económica y el clima de inversiones fueron los elementos mejor evaluados.
Sobre las amenazas para la actividad económica, la mayor parte de los encuestados coincidió en que la desaceleración estadunidense es la que más les preocupa (49 por ciento), pero en el ámbito nacional, el factor más preocupante fue la inseguridad, como señaló 29 por ciento de los empresarios.
En términos de inflación, se indica un escenario positivo, ya que 43 por ciento de los encuestados considera que se ubicará entre 3.5 y 4 por ciento al cierre del año, lo que muestra la confianza de los empresarios en la estabilidad económica. No obstante, la mayoría de los ejecutivos (49 por ciento) señala expectativas de inflación entre 4 y 5 por ciento para el mismo periodo.
En referencia a las reformas pendientes, los directivos y empresarios consultados consideran a la hacendaria como prioritaria (79 por ciento).
La perspectiva para 68 por ciento es que debe desaparecer o disminuir el impuesto sobre la nómina.
En el mismo sentido, 88 por ciento considera que el impuesto empresarial a tasa única (IETU) y el impuesto sobre la renta (ISR) deben unificarse.
En el tema del impuesto al valor agregado (IVA) existe división de opiniones, ya que 53 por ciento considera que debe aumentar, en tanto que 45 por ciento no lo cree así.
Respecto a la iniciativa preferente de reforma laboral aprobada a principios de diciembre de 2012, la mayoría de los encuestados considera que con ella habrá un beneficio en variables clave para la producción y el mercado laboral mexicano.
Los incrementos en competitividad (59), empleo (54), productividad (51) e inversión (45) son los aspectos que se perciben como aquellos donde habrá mayor avance. De igual forma, se considera que la informalidad y los costos laborales se contraerán.
Finalmente, en términos de la reforma energética, 94 por ciento de los encuestados piensan que se debe permitir la inversión privada en la extracción de petróleo, y 69 por ciento plantean que debe desaparecer el subsidio a los combustibles.
En este caso, es claro que los empresarios y directivos encuestados consideran que es prioritario un marco legal donde se defina un régimen de inversión privada para extracción del crudo.