Río de Janeiro, 10 de enero. El pintor y ceramista chileno Jorge Selarón, de 65 años, fue hallado muerto hoy, con marcas de quemaduras en su cuerpo, al pie de la escalinata del Convento de Santa Teresa, en el centro de Río de Janeiro, informan medios locales.

El autor fue encontrado al pie de la escalinata de 215 peldaños en la que realizó un colorido mosaico que convirtió el lugar en punto turístico de la ciudad.

Junto a su cuerpo fue hallada una lata de solvente de tinta. En la escalinata, junto a la cual se encuentra su taller, el artista acostumbraba pintar, exponer sus obras y conversar con turistas.

Efectivos de la policía civil y militarizada llegaron al lugar donde fue encontrado el cuerpo, realizando los trabajos de identificación forense correspondientes.

En una entrevista que, curiosamente, publica hoy el diario O Globo, Selarón confesó que había recibido amenazas de un ex ayudante de su taller, cuyos hermano y sobrino, según el portal del diario Folha de Sao Paulo, están presos por vinculaciones con el tráfico de drogas en la región.

Según Selarón, su ex ayudante lo amenazó de muerte porque quería quedarse con todo. Quería los cuadros, las ganancias. Y eso que yo lo había mandado a Londres, París, Barcelona... Como no estuve de acuerdo (con darle lo que pedía) las amenazas comenzaron en noviembre pasado, y no pararon más.

Un amigo del artista, que no quiso identificarse, citado por el portal G1, dijo que Selarón estaba muy deprimido desde que comenzaron las amenazas, y que desde hacía más de un mes vivía encerrado en su casa.

Ya esperábamos que llegara al límite y pusiera fin a su vida. Andaba muy triste y decía que había sido traicionado, dijo su amigo.

El amigo de Selarón agregó que además de las amenazas, el pasado 23 de noviembre, el ayudante, de nombre Paulo Sergio, derribó los cuadros del artista y dañó sus materiales de pintura. Selarón lo denunció a la policía, pero las amenazas continuaron.

Selarón comenzó a instalar azulejos en la escalinata, tras decidir radicarse en el barrio Lapa. La obra en la escalinata, que une ese barrio con el de Santa Teresa, comenzó a atraer turistas de todo el mundo, incluso mucha gente conoce el lugar como Escalinata Selarón.