Celebra con misa 25 años de su ordenamiento como obispo
Lunes 7 de enero de 2013, p. 39
Saltillo, Coah., 6 de enero. Para el gobierno mexicano, los indígenas de los altos de Chiapas seguirán siendo ilegales, porque aplican su propio esquema de usos y costumbres aun cuando las autoridades se niegan a reconocerlo como parte de los acuerdos de San Andrés, consideró el fraile dominico Raúl Vera López, al celebrar misa con motivo de los 25 años de su ordenación como obispo.
Al hacer un repaso sobre su trayectoria clerical, el obispo de Saltillo dijo que el significado de su 25 aniversario como jerarca católico se resume en empujar y empujar, y en ser terco en contra de las cosas que considero injustas
.
Hablando en nombre de los indígenas, Vera consideró que aun cuando al principio todo mundo parecía tener voluntad de rescatar una ley indígena que respetara las exigencias de los pueblos y comunidades, los acuerdos de San Andrés no han llegado a donde tienen que llegar y nosotros estamos de acuerdo en algo, en homologar la manera de elegir a los dirigentes, en llevar (las cosas con base en) nuestros usos y costumbres
.
En una ceremonia religiosa a la que acudieron más de 2 mil personas, entre ellos los obispos de Torreón, José Guadalupe Galván Galindo; Piedras Negras, Alonso Garza Treviño; Nuevo Laredo, Gustavo Rodríguez Vega, y el emérito de la diócesis de Saltillo, Francisco Villalobos Padilla, Vera pidió a los fieles aprender que el reino de Dios está frente a nosotros y ser cristiano significa empezar a ver lo que está mal y es injusto
.
Ser cristiano, añadió, es tener una comunidad articulada. Tenemos que apropiarnos, encontrarnos con Dios y con la verdadera convivencia humana. Eso es el reino de Dios. Ser cristiano significa que nos convirtamos en fermento de una sociedad nueva, tenemos que salir del cristianismo individualizado y saber que somos de los demás
.
A su ver, los católicos no debemos entendernos solamente como un grupo religioso, sino como parte de una comunidad articulada, porque una posición individual o sectarista nos va a llevar a la confrontación
.
De 67 años de edad, el obispo se dio tiempo para bromear durante la homilía. Ustedes tienen la mala suerte de que aquí es donde más tiempo he estado. En Altamira estuve ocho años, en Chiapas cuatro, y aquí ya llevo 13 años. Hay quienes dicen: ¿a poco ya 13 años? Eso quiere decir que no se les ha hecho tanto, pero también otros pueden decir: ya lleva 13 años, ¿cuántos le faltarán?
, señaló antes de soltar una carcajada.