Hugo Gutiérrez Vega invita a revisitar la obra del autor en los 150 años de su natalicio
Al leer a Constantin Cavafis primero viene la emoción, luego el goce intelectual
Es uno de los poetas de la lengua griega más claros y transparentes
, consideró el escritor
Lunes 7 de enero de 2013, p. a10
El poeta Constantin Cavafis, uno de los más importantes autores griegos cuya influencia internacional sigue vigente, será conmemorado en 2013 por el sesquicentenario de su nacimiento y los 80 años de su fallecimiento.
Lo mejor que podemos hacer para festejarlo es releerlo, estudiarlo y gozarlo, porque lo primero que provoca su poesía es emoción y después viene el goce intelectual
, señaló Hugo Gutiérrez Vega, poeta y director del suplemento cultural La Jornada Semanal.
Agregó que en vida lo acompañó el silencio. Ahora, en la muerte lo acompaña la admiración de sus millones de lectores, porque sin duda es uno de los poetas más visitados y revisitados por los que aman la poesía. El signo central de su vida es Alejandría, que significa el mundo helenístico
.
El autor, nacido en esa ciudad egipcia el 29 de abril de 1863, es uno de los principales exponentes de la literatura en griego moderno. Sobre su dominio de esa lengua, Gutiérrez Vega afirma: “Cavafis escribía en griego helenístico, donde estaban presentes las voces del argeo helleniká, del griego clásico, del kazarévusa, el griego inventado para purificarlo y quitarle todas las influencias turcas, y el dimotikí, el habla del pueblo, además de la lengua de Alejandría. Hay una riqueza verbal incomparable en Cavafis, un conocimiento de los clásicos”.
Nacido en aquella ciudad egipcia, Constantin Petrou Cavafis perteneció a la minoría griega en Alejandría. Sus padres procedían de otra urbe griega que había dejado de serlo: Estambul, de tal forma que fue heredero de un espíritu cosmopolita. Lo cual produjo en el autor de Esperando a los bárbaros una forma diferente de entender su helenismo; además, en su infancia fue educado en la cultura inglesa.
Todos sus poemas, pero particularmente aquél en el que espera a los bárbaros y los bárbaros no llegan, descubren su conocimiento exhaustivo del mundo clásico y su imaginación libérrima para recrearlo. Él siempre estuvo afincado en Alejandría, ahí vivió sus pocos años, ahí escribió, ahí tuvo sus amores, por eso dice en un poema que podemos viajar por distintos países, recorrer el mundo, pero la ciudad irá siempre con nosotros.
En Grecia, 2013 fue nombrado el Año Cavafis; ahí se realizarán actividades en conjunto entre la Dirección General de Cultura Moderna, el Departamento para la Protección y el Desarrollo de las Letras Griegas, el Centro Nacional del Libro, que resguarda el archivo del poeta, y el Centro Cultural Onassis, informaron medios locales.
También colaborarán con el programa las embajadas extranjeras en el país europeo; las áreas de griego moderno y cultura de las universidades en el extranjero, donde se enseña a los estudiantes la obra de Cavafis; la Biblioteca de Alejandría; el Centro Cultural Europeo en Delfos, y organizaciones literarias.
La obra de Cavafis es breve y ajustada. Escribió lo que tenía que escribir. Dejó sus cuadernos. Ahí nos entregó una poesía extraordinariamente clara y transparente, que en eso consiste su gran dificultad. La poesía que alcanza esa claridad, esa transparencia, indudablemente es producto de una labor constante, de un trabajo incansable, por eso es uno de los poetas de la lengua griega más claros y transparentes y, por lo mismo, difíciles, de la era moderna
, describe Gutiérrez Vega.
El conjunto de la producción literaria del autor es poco más de 150 poemas, incluidos en la edición canónica, y algunas otras composiciones consideradas inacabadas por el autor. Publicó poco en vida. Trabajó como funcionario.
La experiencia placentera
se encuentra en buena parte de las letras de este autor, quien también fue conocido por asumir abiertamente su homosexualidad.
Y concluye el periodista: Lo evocamos a los 150 años; para recordarlo hay que leerlo, releerlo, saber que los bárbaros están a la puerta. En el caso de México entraron ya con los 12 años de crueldad panista, sobre todo los seis años anteriores. Pero los bárbaros están a la puerta. ¿Entrarán o no entrarán? En el poema, Cavafis se queda esperando su llegada. Nosotros sabemos que los bárbaros están adentro, como Cavafis lo sabía también
.
Cavafis fue diagnosticado con cáncer de laringe en junio de 1932 y falleció la madrugada del día en que cumplía 70 años: el 29 de abril de 1933.