Aglomeraciones, largas filas, precios elevados y escasez de productos, las viscisitudes
Domingo 6 de enero de 2013, p. 26
Aglomeraciones, largas filas, productos agotados, precios elevados y sin ofertas se vivió el último día de compras de juguetes ante la llegada de los Reyes Magos.
En el Palacio de los Deportes, donde se efectuó una feria del juguete, algunos de los asistentes expresaron su desilusión ante los precios que encontraron. Hay mucha más variedad, pero los precios son prácticamente los mismos, incluso hasta más caros
, comentó la señora Rosario que llegó de Pantitlán con dos de sus hijas.
Con su carga a cuestas: una mesita de madera coloreada con imágenes de princesas, un par de escobas, y un juego de boliche, se quejó de que le ofrecieron un precio, pero al final le cobraron 50 pesos de más. Hasta ahorita que revisé el ticket me di cuenta, te lo pintan todo muy bonito, pero de haber sabido, ni damos la vuelta
, expresó.
De prisa, escoltando al joven que en un diablito lleva una enorme caja, con un vehículo eléctrico rosa dentro, a Elena le asalta la duda. Oiga y se trae todo, ¿verdad?, porque ya mañana no están y ni a quien reclamarle
, cuestiona al ayudante, que sin detenerse, sólo asienta con la cabeza.
Al igual que en los mercados y tianguis que se instalaron en la ciudad, aquí y en los centros comerciales el moderado flujo de padres de familia con el que arrancó la jornada, conforme cayó el día, se transformó en tumultos entre los pasillos, en donde no hubo espacio para los juguetes modestos y sólo se observaron los de moda y marcas reconocidas, que se mantuvieron sin remates ni ofertas especiales.
Solos o en familia, los Reyes Magos intercambiaban entre sí o por teléfono celular los detalles de los sofisticados autos y cocinas eléctricas, las muñecas y los superhéroes de moda con su infinidad de accesorios, así como los personajes de películas infantiles en su vastedad de presentaciones: bicicletas, patines, patinetas, pistas, rompecabezas, juegos de destreza, entre otros.
“Sí encontré el scooter, está padrísimo, pero cuesta dos mil 500, ¿lo llevó?”, consultó vía telefónica una madre de familia, mientras otra animaba a su pareja a comprar una muñeca con los accesorios: ¡Mira ésta, viene con celular y cámara!
Sí, pero la lila está más padre, oye, ¿pero no que sólo quería la cocinita?
, inquirió su compañero.
Las compras de los Reyes Magos contaron con un operativo especial de vigilancia de la SSP-DF y la PGJDF, que desplegaron a 18 mil elementos policiacos en 47 puntos de venta, principalmente en La Merced, Tepito, la Lagunilla y el Palacio de los Deportes.