A 10 días de su estreno en México, el filme español Lo imposible (The impossible) continúa su ascenso en la taquilla en este periodo vacacional, respuesta que satisface a su director artístico Eugenio Caballero.

“Se trató de hacer la película con el mayor respeto posible y creo que sí se siente. Participar en ella fue una experiencia muy distinta en mi carrera y no sólo por recrear la ola, sino por estar con la familia superviviente del maremoto de 2004.

Los integrantes de esa familia estuvieron a nuestro lado durante mucho tiempo; fueron nuestra conciencia para no caer en cosas irreales, explicó Caballero, decorador y director artístico mexicano, quien en 2007 ganó el Óscar por su trabajo en El laberinto del fauno (2006).

Lo imposible está inspirada en María Belón y su familia, que en 2004 sobrevivieron al maremoto que devastó las costas del sureste asiático. Fue dirigida por Juan Antonio Bayona con un presupuesto de 30 millones de euros.

Es una producción gigantesca y me enorgullece haber participado en ella, aunque eso implicó no venir a México ni una sola vez durante casi dos años y medio, pues estábamos muy lejos, del otro lado del mundo, comentó.

Caballero relató que el proceso de producción fue meticuloso, pues había que dotar de complejidad cada una de las escenas.

“La recreación fue fiel y, por consiguiente, muy dolorosa. En los mismos lugares donde los habitantes de Tailandia han tratado de borrar las huellas del maremoto tuvimos que recrear sets gigantes. Es un dolor que permanece en cada uno de los corazones de las personas de ese lugar”.

Eugenio Caballero destacó que este año fue fundamental en su vida porque participó en proyectos de gran interés. lo cual proporciona el balance ideal a su carrera.

Una de las cosas que más me gustan es precisamente lograr el equilibrio entre proyectos internacionales de mucho nivel y el buen cine mexicano, ese es el objetivo para 2013, concluyó Caballero, quien actualmente trabaja en Ciudades desiertas, de Roberto Sneider.