Subieron 32% préstamos al consumo en un año, observa Moody’s
Jueves 13 de diciembre de 2012, p. 28
La morosidad entre usuarios de préstamos bancarios al consumo empezó a mostrar una dinámica similar a la que precedió la crisis de las tarjetas de crédito en México en 2008, advirtió la firma calificadora de inversiones Fitch.
Los bancos que operan en el país comenzaron a relajar sus estándares de otorgamiento de préstamos al consumo, aseguró la firma calificadora de inversiones, en un reporte sobre el sistema bancario que opera en el país.
El rápido aumento de la cartera vencida incrementa nuestra preocupación de que los bancos mexicanos están participando en un segmento de créditos de alto riesgo y altos márgenes (ganancias) que debilitará su calidad de activos
, sostuvo el informe. Las instituciones financieras han relajado sus estándares de otorgamiento de préstamos al consumo, lo que se refleja en un rápido incremento de la cartera vencida
, alertó.
El monto de préstamos al consumo otorgados a la banca, respecto de su cartera total de crédito, se incrementó en 32 por ciento de un año a otro, conforme los bancos relajan sus estándares de otorgamiento e incrementan los montos prestados
, sostuvo Moody’s.
La cartera en mora de los bancos se ha duplicado en los últimos 18 meses, abundó Moody’s, debido a la rápida expansión de los créditos quirografarios, que son los otorgados sin una garantía física, como es el caso de las tarjetas de crédito.
Los préstamos al consumo otorgados por la banca comercial sumaron 562 mil millones de pesos en septiembre pasado, cantidad superior en 41 por ciento a la reportada al cierre de 2010 y mayor en 14 por ciento a la registrada en diciembre de 2011, de acuerdo con los datos más actualizados de la Asociación de Bancos de México (ABM).
Con respecto a septiembre de 2011, la cartera de préstamos al consumo presenta una tasa de crecimiento de 22 por ciento, un ritmo que prácticamente multiplica por seis el de la economía en su conjunto, que es de 3.5 por ciento anual.
Del total de préstamos otorgados por la banca al sector privado, poco más de una cuarta parte, 26 por ciento, está colocada en créditos al consumo: tarjetas de crédito, para la compra de automóviles, préstamos personales y los garantizados con la nómina de los trabajadores, según la ABM.
Moody’s apuntó en su reporte especial que el rápido crecimiento en créditos al consumo no revolventes (es decir, distintos a las tarjetas de crédito) y el resultante aumento de la morosidad “se encuentran ligados a la relajación de los estándares de originación de los préstamos, ejemplificada por plazos de crédito más largos y saldos promedio más elevados.
Entre febrero y septiembre de 2012 los créditos de nómina aumentaron a una tasa de crecimiento anual de 41 por ciento, mientras los créditos personales lo hicieron 49 por ciento. El rápido crecimiento se siente similar al entorno creado justo antes de la crisis de tarjetas de crédito de 2008
, advirtió la firma.
Acotó que las preocupaciones sobre el incremento de la morosidad se contrarrestan por los bajos niveles de endeudamiento de las familias, la aún modesta porción que representan los créditos al consumo no revolvente (personales y de nómina) con relación al total de créditos y el adecuado colchón de reservas de los bancos.