Pachuca, Hgo., 5 de diciembre. El estadio Hidalgo, en el que se hizo ídolo en México el colombiano Miguel Calero con el Pachuca, fue el escenario en el que se dio el último adiós al guardameta, fallecido ayer a los 41 años a consecuencia de trombosis cerebral.

Una enorme camiseta del blanquiazul fue ondeada en la tribuna del inmueble, que tantas veces hizo vibrar el arquero con sus espectaculares atajadas por las que fue apodado Show, mientras se oficiaba la misa de cuerpo presente con la que fue despedido.

El recibimiento se le hizo a lo grande, dando la vuelta olímpica, como lo hizo en vida en las cuatro ocasiones que fue partícipe de las victorias que lograron los Tuzos en el campeonato local.

¡Miguel, hasta siempre! Tu afición siempre te recordará, expresaron asistentes a la ceremonia, en la que fue ubicado el féretro en el centro de la cancha.

Familiares, amigos, directivos de futbol, jugadores, aficionados y público en general participaron en la despedida, que concluyó con la emotiva entonación de la canción Amigo, de Roberto Carlos.

El pasado martes en la noche Calero recibió un multitudinario acompañamiento durante su velatorio en el auditorio Gota de Plata en Hidalgo.

El portero será cremado en nuestro país y posteriormente sus restos repartidos en Colombia y México, país del que se hizo ciudadano y convirtió en su segunda patria, por lo que se estudia hacerle un nicho en el estadio Hidalgo o en la Universidad del Futbol que pertenece al Pachuca.

De momento el club hidalguense no ha aclarado la situación, aunque informó en su portal oficial que Calero tendrá un lugar especial en su estadio y por supuesto en los corazones del club y sus seguidores.

El futbol a nivel mundial lamentó la desaparición del arquero. El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, destacó el aporte del guardavalla al balompié de su país de origen y de México, y dijo que la organización acompaña a los colombianos en la dolorosa pérdida.

Miguel no solo representó con mucha honra a Colombia, formando parte de su plantilla en el Mundial de 1998 en Francia, sino que también fue uno de los protagonistas en México, su país de adopción, de la época dorada del Pachuca, equipo con el que llegó a participar en dos copas mundiales de clubes de la FIFA, en 2008 y en 2010, señaló el dirigente en una carta enviada al presidente de la Federación Colombiana de Futbol, Luis Bedoya.

La Federación Mexicana de Futbol también recibió condolencias de la Concacaf por el fallecimiento de Calero.

Después de una impresionante trayectoria en el futbol internacional nos sentimos orgullosos del legado de Calero a lo largo de su vida. No sólo se ha perdido un gran talento, sino, ante todo, un gran ser humano. Esperamos que su familia pueda encontrar consuelo en la ferviente admiración y la expresión de las condolencias de sus muchos seguidores, señaló en un comunicado el presidente de la Concacaf, Jeffrey Webb.

El guardameta había sufrido una trombosis venosa en septiembre de 2007, por lo que estuvo medio año sin jugar con Pachuca tras ser sometido a una operación en el brazo izquierdo.

Calero, quien jugó 11 años con el Pachuca, se formó en las divisiones inferiores del Deportivo Cali y debutó en 1987 en el futbol profesional con el Sporting de Barranquilla. En 1992 regresó al Cali y entre 1998 y 2000 militó en el Atlético Nacional de Medellín.

El equipo de los Tuzos lo contrató en 2000. Hace poco más de un año se retiró como jugador y se convirtió en entrenador de porteros del club, con el que ganó cuatro títulos de liga (2001, 2003, 2006 y 2007), una Copa Sudamericana y cuatro cetros de la Concacaf.

En 2001 ganó la Copa América con Colombia, aunque en ese momento era suplente en la selección.