En bachillerato, 50% de alumnos presenta dificultades para razonar
Critica en un informe la desafortunada
reforma en la materia
Jueves 22 de noviembre de 2012, p. 45
Desde el prescolar comienzan los rezagos en el aprendizaje de los niños, pues al terminar ese nivel casi 10 por ciento no sabe que se lee y se escribe de izquierda a derecha y, al concluir la primaria, 27 por ciento no puede relacionar el inicio de la menstruación con la capacidad de reproducción. En la secundaria las carencias se han agravado, pues la cuarta parte no identifica el papel que juegan los anticonceptivos en la planificación familiar y, al llegar a la preparatoria, 50 por ciento presenta dificultades para razonar y pensar matemática y científicamente.
De acuerdo con el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), de cada mil niños que se inscribieron en primaria en el ciclo 2001/2002, sólo 438 terminaron el bachillerato 12 años después. Las carencias en la formación de los niños de primaria y los alumnos de secundaria son graves
y limitan sus posibilidades de continuar aprendiendo
, sostiene.
En tanto, la asistencia a la escuela es 61 puntos menor para el grupo de entre 15 y 17 años que trabajan jornadas de medio tiempo o mayores, en comparación a quienes no lo hace,n y es 27 puntos menos entre quienes viven en pobreza alimentaria, en relación con alumnos que no están en esa situación de vulnerabilidad.
El INEE estableció lo anterior durante la presentación que hizo el presidente del organismo, Mario Rueda Beltrán, ante la Comisión de Educación del Senado. Así, el organismo recomendó que más allá de las declaraciones retóricas, en México se necesitan estrategias
que den atención prioritaria a los sectores más desfavorecidos, para que la escuela no reproduzca las desigualdades del hogar, pues nuestro sistema educativo “está marcado por una profunda inequidad.
Es fundamental evitar que las diferencias se conviertan en desigualdades educativas, pues más tarde éstas darán lugar a desigualdades sociales
, por lo que se deben evitar medidas uniformes que traten a todos como si fueran iguales, reasignar el gasto y dar los mejores recursos a los más desfavorecidos, por lo que enfatizó que para que la evaluación ayude al mejoramiento de la calidad, es necesaria la creación del sistema nacional de evaluación, pues ésta no se ha dado de manera ordenada, articulada ni sobre la base de un marco sistémico.
El INEE precisó que 28 por ciento de los alumnos de primaria no terminan ese nivel en seis años y la proporción aumenta a 50 por ciento entre los niños de las escuelas indígenas. Sólo cuatro quintas partes de quienes ingresan a la secundaria la concluyen en tres años. En el bachillerato, apenas 62 de cada 100 estudiantes terminan ese nivel en el tiempo establecido.
En cuatro de cada 10 escuelas de prescolar, una sola docente atiende a todos los niños y se hace cargo de la dirección del plantel, y seis de cada 100 educadoras realizaron cambios en la escuela meses antes de que concluyera el ciclo, situación que repercutió de manera negativa en las oportunidades de aprendizaje.
En este sentido, establece que la reforma que hizo obligatorio el prescolar ofrece un ejemplo de una política pública desafortunada, tomada sin haber hecho un diagnóstico de las condiciones en que se ofrecían los servicios educativos
.