Las importaciones de papa fresca de Estados Unidos pueden generar pérdidas hasta de 10 mil 300 millones de pesos y obligarían a los productores a invertir más de 30 mil pesos por hectárea sólo en el control de plagas que traerá consigo el tubérculo importado, asentó la Confederación Nacional de Productores de Papa (Conpapa) en un estudio que presentará hoy a la Comisión de Agricultura y Ganadería del Senado.

La organización pedirá a los legisladores que intervengan para frenar las importaciones de papa aprobadas por la Secretaría de Economía.

De acuerdo con el estudio, elaborado por el Grupo de Economistas y Asociados a petición de Conpapa, los agricultores produjeron 1.4 millones de toneladas de tubérculo el año pasado, con un valor de 9 mil millones de pesos; la superficie cosechada alcanzó más de 54 mil hectáreas en beneficio de 77 mil familias localizadas en 23 estados. En dicho año se generaron 17 mil 500 empleos directos y 51 mil 600 indirectos, los cuales serían afectados por las importaciones, pero además se pone en riesgo los cultivos de tomate, frijol, chile, caña de azúcar, cebolla y berenjena.

A partir de que la SE anunció las importaciones de papa fresca de Estados Unidos, Conpapa inició cabildeos con las autoridades de Sagarpa y SE para detener las compras con el argumento de que los productores estadunidenses no cumplen con el protocolo de inocuidad ni con las condiciones fitosanitarias. En los pasados 10 años Estados Unidos envió papa contaminada con plagas a la franja fronteriza, lo que representa un riesgo para la agricultura nacional, insistió.

La papa ocupa el quinto lugar entre los principales cultivos, después de maíz, frijol, trigo y arroz. Entre las peticiones que hoy presentará Conpapa a los senadores está elaborar un análisis del costo-beneficio de la importación de papa fresca, así como de los daños a terceros cultivos para determinar la importancia económica de la producción del tubérculo en el país; calcular la derrama económica y el empleo directo e indirecto generado por dicha siembra, y cuantificar la incidencia del producto en la canasta alimenticia de los mexicanos.

Conpapa expuso que si bien la superficie cosechada con el tubérculo ha disminuido 33 por ciento desde 1990 a 2011, es decir en 33 mil hectáreas, actualmente se destinan 54 mil hectáreas a dicho cultivo, y se obtienen 1.43 millones de toneladas, la oferta nacional es suficiente para cubrir la demanda interna a un precio accesible a los consumidores. El costo de la papa se ha mantenido 6 puntos porcentuales por debajo del Índice Nacional de Precios al Consumidor durante 22 años, subrayó la organización.

Asentó que de dicho cultivo dependen 8 mil 700 productores y 77 mil 800 familias; genera 17 mil 500 empleos directos y 51 mil 600 indirectos, además de 6.9 millones de jornales al año, los cuales se perderán con el aumento de las importaciones de papa fresca, que hasta el año pasado fueron de 91.7 mil toneladas.