El Buen Fin es una estrategia para alentar el consumo en un mercado interno deprimido por los bajos salarios y la carencia de mecanismos que favorezcan su crecimiento desde la estructura impositiva.

Sin embargo, el aumento del consumo fomentado mediante el crédito es una ilusión que termina beneficiando sólo al sector financiero, pues a través de promociones a plazos sin intereses éste asegura un flujo constante de recursos durante el periodo en que se pague la deuda, advirtió Miguel Santiago Reyes, director del Observatorio del Salario de la Universidad Iberoamericana-Puebla.

En entrevista, señaló que los más beneficiados serán los bancos y tiendas como Electra o Walmart.

Expresó que si realmente se quisiera alentar el consumo o el desarrollo del mercado interno se tendría que ir por dos caminos: buscar mecanismos para favorecer a las Pymes vía impuestos (por ejemplo, eliminando el impuesto empresarial a tasa única –IETU–) y fomentar un alza al salario.

Recordó que, en términos de ingresos, el IETU genera aproximadamente 10 por ciento de lo que se recauda a través del impuesto sobre la renta, lo que, dijo, no es sustancial, pero sí afecta la liquidez de pequeñas y medianas empresas, ya que las grandes pagan ISR porque pueden diferirlo.