El presidente de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Manuel Granados, se pronunció en contra de que se haga uso de la fuerza pública para solucionar el conflicto que vive la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM).

En entrevista, el también coordinador de la bancada perredista externó que el órgano legislativo en todo momento será respetuoso de la autonomía de la casa de estudios, cuya crisis se debe enfrentar con cautela y prudencia y no afectar aún más a la comunidad universitaria.

Consideró que las expresiones del coordinador de la bancada panista en la ALDF, Federico Doring, rayan en la discriminación contra los estudiantes y su planta académica.

Confirmó que acordó con el secretario de Gobierno del Distrito Federal, Héctor Serrano, y el ombudsman capitalino, Luis González Placencia, tener un primer acercamiento con las partes en conflicto el próximo martes, para fungir como mediadores.

A su vez, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa, Dinorah Pizano, consideró que ni la toma de las oficinas administrativas ni la insistencia del tercer consejo de la UACM en continuar con sus sesiones –a pesar de los problemas de legitimidad que enfrenta– abonan a resolver la crisis en la casa de estudios, por lo que reiteró su llamado a las partes a retomar el diálogo para resolver el conflicto.

Es lamentable que se mantengan estas posturas irreconciliables, que sólo agravan más el problema, expresó. Señaló que los únicos afectados son los más de 14 mil estudiantes y los trabajadores de la institución.

La asambleísta, quien desde la semana pasada inició acercamientos con ambos grupos, con el propósito de reinstalar las mesas de diálogo, expresó que las dos partes deben ser responsables de sus actos y detener las confrontaciones de un lado y otro.

No es bueno que se estén provocando; los ánimos ya están demasiado exaltados; los llamo a que se detengan y antepongan el derecho de los jóvenes y del personal a estudiar y trabajar.

Expresó que son muchos los factores que han contribuido a que el clima de confrontación crezca. Me parece que no hay un solo nombre o apellido, son muchos los responsables, y en todos ellos debe caber la prudencia, porque de lo contrario las diferencias cada vez van a ser mayores e irreconciliables.