Sustraídos, 3 millones de barriles de hidrocarburos, 25% más que a septiembre de 2011
Detectadas, mil 91 tomas clandestinas en la red de la subsidiaria de Refinación, 58 en Gas y Petroquímica Básica y 35 en la de Exploración y Producción; Veracruz, la entidad con mayor hurto
Viernes 9 de noviembre de 2012, p. 23
En los pasados 12 meses el robo de combustibles de los ductos de Pemex alcanzó 3 millones de barriles, lo que representa un quebranto para las finanzas de la paraestatal de al menos unos 3 mil 900 millones de pesos, según revelan informes de la petrolera mexicana.
A septiembre de 2012, el volumen de hidrocarburos extraídos ilegalmente fue 25 por ciento mayor que el calculado en septiembre de 2011, cuando alcanzó alrededor de 2 millones 404 mil barriles.
En el último año, los ductos de Pemex-Refinación fueron los preferidos por las bandas de la delincuencia dedicadas a la ordeña de ductos con mil 91 tomas clandestinas; seguidas de 58 de Pemex Gas y Petroquímica Básica y 35 de Pemex Exploración y Producción.
Entre septiembre de 2011 y septiembre de 2012 las entidades donde se detectó el mayor número de tomas clandestinas correspondientes a los ductos de Pemex-Refinación fueron encabezadas por Veracruz, con 149; Sinaloa, 110; Tamaulipas, 109; Nuevo León, 89; Sonora, 86; Jalisco, 78, y Puebla con 75, entre otras.
Por el contrario, los estados menos afectados por este ilícito fueron San Luis Potosí, con tres; Tlaxcala y Michoacán, con siete, respectivamente.
Los informes más recientes de Pemex detallan que la red total de ductos de la paraestatal suman 68 mil 287 kilómetros, de los cuales 27 mil 194 kilómetros corresponden a ductos de producción; 10 mil 65 kilómetros son de oleoductos; 17 mil 963 kilómetros de gasoductos; 8 mil 374 kilómetros de productos petrolíferos; 2 mil 94 kilómetros de petroquímicos básicos y secundarios y 2 mil 597 de otros de Pemex Petroquímica, que incluyen rack de tubería, entendido como el conjunto de marcos de concreto y puentes elevados de uno o más niveles, en los que se apoyan las tuberías.
Cabe destacar que la extracción ilícita de hidrocarburos en el Sistema Nacional de Ductos (SND) daña el patrimonio de Petróleos Mexicanos y pone en riesgo la seguridad nacional, al amenazar tanto la vida de las personas en las comunidades aledañas a las instalaciones como al medio ambiente.
En todos los casos de localización de tomas clandestinas, el área jurídica de Pemex realizó la denuncia respectiva ante el Ministerio Público Federal para iniciar las averiguaciones procedentes. La prevención, investigación, persecución, procuración y sanción a los responsables de estos ilícitos en contra de la empresa corresponde a las instancias federales de seguridad y procuración de justicia.
Los datos oficiales de Pemex precisan que el número de tomas clandestinas se triplicó en los pasados cuatro años. En 2009, cuando empezó a ser más evidente el robo de combustibles a través de la sustracción ilícita, fue de 439; en 2010 aumentó a 631; en 2011 se disparó a mil 419 tomas clandestinas y en el periodo enero-septiembre se acumulan mil 184 instalaciones para la sustracción de hidrocarburos.
El director general de Pemex, Juan José Suárez Coppel, atribuyó la expansión de este fenómeno a la falta de recursos financieros para vigilar los casi 70 mil kilómetros de ductos de la paraestatal en el país.