Domingo 28 de octubre de 2012, p. 14
El Sistema Penitenciario Federal trasladó en las últimas dos semanas a más de 2 mil internos que se encontraban en prisiones estatales a cárceles federales, como las Islas Marías y a los diferentes Centros Federales de Readaptación Social (Ceferesos), y prepara la inauguración de otras dos prisiones de máxima seguridad que fueron construidas con recursos de la iniciativa privada en Oaxaca y Durango.
De los más de 2 mil prisioneros cambiados de cárcel, este fin de semana, 967 que estaban en prisiones de los estados de Zacatecas, Guanajuato, Sonora, Chihuahua, Baja California y Guerrero, fueron internados en el Cefereso número 12, en el municipio de Ocampo, Guanajuato, que fue inaugurado el pasado 9 de octubre.
Este mes la Policía Federal completó el traslado a centros federales de 221 internos que se encontraban en prisiones del estado de Coahuila; 173 de cárceles del estado de Chihuahua; 122 que estaban en la cárcel de Topo Chico, en Nuevo León, y 102 de los centros penitenciarios de Puebla.
La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal informó que el pasado viernes fueron ingresados en el Cefereso número 12 un total de 66 reos que se encontraban en el estado de Aguascalientes y 132 que purgaban sentencia en Nuevo León.
Dinero privado
Asimismo, este sábado y domingo concluirá el traslado de 769 reos federales que ya han sido sentenciados y se encontraban en cárceles locales, con lo cual se contabilizaron 967 ingresados esta semana al Cefereso número 12.
Esta prisión federal es una de las dos que ya han sido terminadas y que se construyeron con recursos de la iniciativa privada bajo un esquema en el cual el gobierno federal pagará 4 mil millones de pesos en un plazo de 20 años, y les concesionará la operación de los servicios de alimentación, lavandería y mantenimiento.
Conforme a este esquema financiero se construyen seis prisiones más, para finalizar con ocho Ceferesos construidos con recursos del sector privado. En ese contexto se inaugurarán en los próximos 15 días los Ceferesos de Oaxaca y Durango.
En suma, las prisiones construidas por la iniciativa privada aportarán 20 mil espacios a la capacidad del Sistema Penitenciario Federal, que concluirá en diciembre con 50 espacios de reclusión.