Domingo 21 de octubre de 2012, p. a16
Todo lo que corre y vuela es bueno para la cazuela
, dice el refrán. Aunque no todo lo que lo integra puede resultar del agrado particular. Y aquí, quien tiene la última palabra es el comensal.
Paco Ignacio Taibo I, en esta entrega del Encuentro entre dos fogones, de manera lúdica e ilustrativa recopila y enumera cómo nació y creció lo que conocemos como cocina mexicana; en la cual, una de sus mejores presentaciones es a partir del invento del mole en el siglo XVII, en Puebla de los Ángeles, nada más barroco y variado que este guiso, pues hay desde el tradicional poblano, con chocolate y buen número de chiles, hasta los muy famosos siete moles de Oaxaca.
El encuentro entre dos continentes, Europa y América hace más de 500 años, provocó también la fusión de recetas. Iban y venían productos que con su sabor y extrañeza cautivaron a reyes y emperadores.
Gastronomía, literatura e historia se funden en este volumen que recopila recetas que van desde la época precolombina, la conquista, la Iindependencia, la Revolución y hasta lo contemporáneo de la comida mexicana, sin dejar de hacer un recuento del menú en las tradicionales fondas de cualquier colonia en el país.
Halagos aparte merecen los chiles en nogada, que junto con el mole, dice el autor, forman parte de la cumbre de la cocina de México, incluidas las bebidas embriagantes como el pulque, el tequila y el mezcal.
Poesía y gastronomía riman, así Taibo I nos hace una muestra de que él puede mezclar no sólo recetas, sino también versos, y para ello nos presenta una adaptación suya de La suave patria, de Ramón López Velarde, a la que él llama Sabrosa patria
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Título: Encuentro de dos fogones
Autor: Paco Ignacio Taibo I
Editorial: Planeta
Número de páginas: 342