Viernes 5 de octubre de 2012, p. 16
En protesta por el clima de violencia desatado por las autoridades contra los migrantes indocumentados, los activistas Rubén Figueroa, del Movimiento Migrante Mesoamericano, y Tomás González, del Centro de Derechos Humanos del Usumacinta, se encadenaron ayer frente a las rejas de la estación migratoria de Tenosique, Tabasco.
Los agentes del Instituto Nacional de Migración están actuando de forma violenta, salvaje y perversa contra los indocumentados, y parece que están enviando grupos de choque a Tenosique y otras zonas, como Chiapas y Veracruz. Sigue llegando gente muy golpeada al albergue La 72, que dirige fray Tomás González, por eso nos manifestamos de esta manera
, explicó Figueroa en entrevista con La Jornada.
A pesar de todas las evidencias de la actuación de los agentes del INM –dijo–, las autoridades se han negado a reconocer el fenómeno. Nos dicen que es mentira, que no está pasando nada. Tenemos testimonios en video y fotos, pero ellos niegan todo; por eso decidimos tomar esta acción radical, pero pacífica
, aseveró.
En este escenario, Figueroa advirtió que el reglamento de la nueva Ley de Migración es totalmente violatorio de los derechos humanos, porque no da a los indocumentados la posibilidad de regularizar su estancia en el país; deja fuera la posibilidad de obtener una visa humanitaria, cuando ese documento les permitiría ya no viajar en tren
.
En los pocos días que quedan a su gobierno –sostuvo–, parece que Felipe Calderón se empeña en demostrarnos que su sexenio fue el más violento contra los migrantes, y lo que va a venir no parece distinto. En el gobierno de Enrique Peña Nieto no esperamos ningún cambio, sino que se endurezcan aun más las agresiones
, advirtió.