Bruno Márquez lanzó 3 pases de anotación; la UNAM ganó 28-10
Fracasamos hoy, pero nos levantaremos, dice coach de Águilas Blancas
Domingo 23 de septiembre de 2012, p. a15
Este es el verdadero clásico, el estudiantil, el de los colores de las dos principales instituciones educativas de este país, repetían jugadores, entrenadores, pero sobre todo público, los casi 40 mil asistentes, en su mayoría estudiantes, que acudieron al máximo ritual competitivo, el duelo de futbol americano colegial de Pumas CU contra Águilas Blancas del Politécnico.
La victoria fue para los universitarios por 28-10, gracias a un mariscal de campo, Bruno Márquez, quien con un brazo mágico lanzó tres pases de anotación y a un linebacker, David Aceves, en estado de lucidez, que en dos ocasiones interceptó el ovoide, una de ellas para un regreso de touchdown.
Guerra de nervios
El ambiente era inmejorable con una entrada envidiable en el estadio Olímpico Universitario, del lado del pebetero el vino politécnico tapizaba la zona. En lado opuesto todo era azul y oro. La condición de local anticipaba cierta ventaja para Pumas, pero un dato estadístico, la marca de 14 triunfos consecutivos sobre equipos del IPN, los hacían favoritos.
Todo se reflejaba en la seguridad con la que jugaron los universitarios, en contraste con unas Águilas Blancas titubeantes, donde el errático mariscal de campo, Rodrigo Mercado, parecía un resumen nervioso del equipo: fue interceptado en dos ocasiones y parecía perder el temple ante la presión de la defensiva felina.
El nerviosismo en la ofensiva de los emplumados empezó a notarse desde el primer cuarto, en el que Pumas abrió el marcador con un envío de cinco yardas de Márquez, que con el extra puso los primeros 7 puntos del juego.
Un breve disparo de orgullo empujó la reacción de los politécnicos y Rodrigo Mercado demostró que si mantiene la calma puede ser letal por el aire al conectar con Arturo Callejo, más el extra, consiguieron momentáneamente empatar 7-7 el encuentro.
Parecía que el duelo sería apretado. Pero de nuevo el desvarío y la falta de confianza provocó errores que serían aprovechados por el equipo local, cuya respuesta fue casi inmediata con un pase impecable de Márquez para volver a adelantarse, con marcador 14-7.
Antes del mediotiempo Pumas se adueñó del juego: David Aceves, astuto y todo atención, interceptó el balón para escapar en una frenética carrera de 90 yardas que daría el 21-7.
Ante la complicada situación, Águilas Blancas buscó acortar la distancia con un gol de campo de 27 yardas.
En la segunda parte el partido se volvió más cerrado, pues aún con el marcador en contra los del Politécnico no dejaron de aporrear a la ofensiva Puma, que perdió profundidad. En esa disputa de cada centímetro del campo, llegaron hasta el último cuarto.
Con el tiempo en contra Márquez disparó el ovoide en un pase de 30 yardas a las manos de Heriberto Salazar, quien consiguió burlar una cerrada escolta para anotar el 28-10 definitivo.
Raúl Rivera, coach de los universitarios, reconoció que su equipo no estuvo exento de errores, pero que en un clásico lo importante es conseguir el resultado.
Es bueno que no sepan por qué les ganamos, porque así podemos seguir ganándoles
, dijo Rivera. Los clásicos son atrabancados y hoy vamos a disfrutar la victoria de este
, remató.
El entrenador de Águilas Blancas, Héctor López, trató de digerir con calma la derrota y anticipó que es inevitable perder en la temporada.
Nos vaticinaron una derrota abultada; sin embargo, al final el marcador no fue tan amplio
, dijo López. Fracasamos hoy, pero nos levantaremos, como la vida misma
, concluyó.