Lunes 17 de septiembre de 2012, p. 35
Teherán. La furia de los musulmanes desatada por la película islamófoba que provocó manifestaciones violentas en varios países se explica, pero no justifica la muerte de diplomáticos estadunidenses en Libia, afirmó el comandante en jefe de los Guardianes de la Revolución de Irán, el general Mohamed Ali Jafari, el primer mando militar iraní que toma distancia del ataque al consulado estadunidense en Bengasi, donde murió el embajador Christopher Stevens. Esta ira no otorga de ninguna manera el derecho a matar, pero han herido los sentimientos de los musulmanes que no tenían más opción que protestar ante las embajadas
estadunidenses, agregó.