Sin ser espectaculares sumaron su sexta victoria del torneo
Los azulgrana desperdiciaron un ligero dominio en la primera parte
Lunes 17 de septiembre de 2012, p. 4
Cancún, 16 de septiembre. Xolos de Tijuana está imparable y logró acumular tres victorias consecutivas, ayer visitó al Atlante y tuvo el pulso necesario para vencerlo a domicilio por 2-1, un resultado con el que ahora los de la frontera norte se instalan en el superliderato del torneo. No fueron espectaculares, pero sí oportunos.
El Turco Mohamed, además, se confirma como uno de los técnicos más estables en la liga mexicana, donde alcanzó en esta octava jornada su sexta victoria y suma 19 puntos con los Xolos.
Los goles de la victoria fueron obra del colombiano Duvier Riascos, al minuto 50, y de Alfredo Moreno, al 52. El chileno Esteban Paredes descontó para los de casa, al 87.
Aunque ambos equipos tenían mucha ambición desde el arranque del partido, pues los de Tijuana llegaron como segundos en la tabla y los azulgranas pretendían subir al tercer sitio de la general, pero el ímpetu trabó las acciones en la media cancha durante la primera parte, con dos escuadras voluntariosas y aguerridas. Con esa determinación cada metro de la cancha se peleó con coraje y resultaba difícil avanzar más allá del medio campo.
A pesar de la insistencia, en esa primera parte no hubo grandes jugadas o demasiadas llegadas que pudieran considerarse de verdadero peligro.
En el jaloneo por pisar el área rival, Atlante se mostró más hábil y había estado cerca de abrir el marcador que los de Tijuana. En esa primera parte del encuentro la apuesta de los técnicos fue no descuidar la defensa y el conjunto azulgrana dominó por momentos, pero sin la suficiente malicia como para sacar ventaja.
Poco peligro en los arcos y mucha pelea ríspida a ras de suelo. Algunos jugadores sudaban la camiseta con verdadera pasión, como el Kikín Fonseca y Esteban Paredes, aunque el esfuerzo casi siempre carecía de precisión para abrir la cuenta. Kikín provocó un alarido cuando estuvo a nada de anotar el primero, de cabeza en un tiro libre, pero fue asunto de suerte o de maniática precisión, porque esa pelota parecía que entraba.
Esa dupla estuvo a punto de causar un bochorno a Xolos: Kikín se aproximó amenazante al área y envió un pase de manufactura artesanal a Paredes, quien no pudo controlar y el disparo fue desviado por Javier Gandolfi, en un trazo que pasó rozando su propio poste.
El juego se rompió
en el comienzo de la parte complementaria, en que Tijuana tomó una ventaja que ya no dejaría ir en todo el partido. El primer gol llegó al minuto 50, en un balón que Pellerano filtró para el colombiano Duvier Riascos, quien dentro del área se quitó con un gran enganche a un zaguero, para definir con la zurda al ángulo superior derecho.
Los azulgranas todavía no se recuperaban del primer tanto, cuando un grave error del ecuatoriano Jorge Guagua le abrió las puertas a los visitantes para finiquitar las acciones.
Guagua retrasó mal un balón, lo que aprovechó Moreno para enfilar al área y estrellar su remate en Villalpando, el rebote le quedó a Riascos, quien con marco abierto lo puso en el poste, pero con tan buena surte que le volvió a caer al Chango y éste sólo tuvo que empujarlo al fondo de las redes, al minuto 51.
Cuando parecía que todo estaba definido, el chileno Esteban Paredes volvió a sacar la cara por la ofensiva atlantista para poner el 2-1 a tres minutos del final y ponerle emoción a los últimos instantes, sin embargo, solo quedó en eso y vieron cómo su racha de cinco partidos sin perder fue rota por el nuevo superlíder.