El sábado 8 comenzará su Temporada de otoño 2012 en la sala Silvestre Revueltas
La Filarmónica de la Ciudad de México busca hacer conexión con la sociedad, dice su director huésped principal
Plantea tener más presencia en espacios públicos y crear más música escénica
Jueves 6 de septiembre de 2012, p. 3
La Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM) es un centro de creación, de visión, de pensamiento crítico, y el talento intrínseco de la agrupación son los músicos. Es un lugar que propone e intenta una conexión con la sociedad.
Así define José Areán, director huésped principal de la OFCM, el perfil de la agrupación que este 8 y 9 de septiembre comenzará su Temporada de otoño 2012 en la sala Silvestre Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli.
La apuesta de la filarmónica, abunda, ha sido tener un perfil moderno y propositivo que fomente la creación y, sobre todo, que el pensamiento crítico tenga una causa
. También reconoció que necesitan más recursos para comisionar obras y tener mayor presencia en los espacios públicos de la capital.
“Creo –sostiene José Areán– que podemos crear más música escénica. El año pasado, la OFCM interpretó una opereta en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, porque la función de una orquesta es dominar el género teatral escénico, sea ópera, ballet, cualquier pieza escénica.
También hemos propuesto estar cerca de la comunidad de compositores; tenemos un consejo asesor, conformado por intérpretes, compositores y algunos promotores culturales que se han dado cita durante varias sesiones para disertar sobre mecanismos que permitan al ensamble mejorar su programación y generar nuevos proyectos.
La nueva temporada de la OFCM se iniciará este sábado y domingo con un concierto dedicado a la música mexicana, con obras de José Pablo Moncayo a 100 años de su nacimiento; de Eduardo Mata, quien ayer cumpliría 70 años, y de Carlos Chávez, maestro de los dos compositores.
Al respecto, el músico indicó que la agrupación –durante septiembre– interpretará música mexicana que no es la más usual, ya que la orquesta se ha caracterizado por su espíritu de exploración.
“José Pablo Moncayo tiene obra importante que debemos escuchar y redescubrir; el programa incluye su sinfonía Cumbres, una obra olvidada en el repertorio, porque se interpreta más su sinfonieta.”
Del compositor Eduardo Mata se ejecutará su primera y segunda sinfonías, que se conocen como romántica y clásica.
En noviembre, con motivo del Día de Muertos, se interpretarán el Réquiem de Guerra, de Benjamin Britten, y un programa con la Sinfonía No. 40, de Wolfgang Amadeus Mozart, dirigida por el Avi Ostrowsky, así como la Obertura trágica, de Johannes Brahms, y la Sinfonía No. 6, Patética, de Piotr Ilich Chaikovsky.
“Me parece importante el Réquiem de guerra, porque es un homenaje a los muertos que tenemos hoy día, no solamente es aquella obra de Britten que se hizo en el pasado, sino que nosotros también tenemos víctimas y es fundamental hacer una reflexión de lo que vivimos”, explica Areán.
Como parte del Festival Puentes: III Encuentro Hispano Mexicano de Música Contemporánea, la Filarmónica de la Ciudad realizará el estreno en México de Jardín con palmera para orquesta y percusión, del mexicano Javier Álvarez, y el Concierto para piano, del español José Manuel López López.
José Areán subraya que ese encuentro fortalece los lazos culturales entre México y España, además de plantear una visión de la creación iberoamericana.
La temporada incluye, en diciembre, una reflexión sobre John Cage con motivo de su centenario, en el que participará el ensamble Tambuco, el cual ofrecerá un concierto; también se efectuará una charla sobre el orden y el caos en la obra del autor estadunidense.
John Cage tiene una obra extensa, así que vamos a dedicarnos sólo a algunas de las piezas que él realizó. Su música es conceptual y tuvo influencia en la poesía, en la filosofía, y en el pensamiento de diversos artistas.
La programación se complementa con otras piezas orquestales de Strauss, Mussorgsky y Ravel. Asimismo, se realizará el estreno mundial de El conejo en la luna, obra que la OFCM comisionó al compositor mexicano Leoncio Lara Bon.
“Creemos –asegura José Areán– que una orquesta es un motor de creación que puede comisionar obra grande. Nos interesa en ese sentido proponer y propiciar que los compositores permanezcan activos y aliados a la agrupación.”
La temporada de septiembre-diciembre de la OFCM se realizará los sábados a las 18 horas y los domingos a las 12:30 horas, en la sala Silvestre Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli (Periférico Sur 5141, colonia Isidro Fabela).