En acto terrorista murieron 11 atletas israelíes
A la ceremonia asistirán siete sobrevivientes
Miércoles 5 de septiembre de 2012, p. a15
Berlín, 4 de septiembre. Alemania recordará mañana los 40 años de la masacre perpetrada por terroristas palestinos en los Juegos Olímpicos de Munich 1972, con un acto al que asistirán unos 600 invitados, entre los que destacan siete sobrevivientes.
El 5 de septiembre de 1972 un comando del grupo Septiembre Negro tomó como rehenes a 11 atletas israelíes en la Villa Olímpica. El fallido rescate de las fuerzas de seguridad alemanas terminó con la muerte de todos ellos, además de cinco terroristas y un policía germano.
El homenaje se efectuará a las 14 horas locales en el aeródromo de la antigua base militar de Fürstenfeldbruck, escenario del fatal enfrentamiento final entre los terroristas y la policía.
También concurrirán el alcalde de la Villa Olímpica de los Juegos de 1972 y deportistas que obtuvieron medallas ese año.
Los edificios públicos de Baviera tendrán las banderas a media asta y por primera vez se expondrán las fotos de las 11 víctimas en la antigua torre de control del aeropuerto.
La delegación israelí incluirá a Ulrike Nasse-Meyfarth, uno de los atletas sobrevivientes, quien había ganado oro en salto horas antes de la masacre. También participarán el viceprimer ministro Silvan Shalom y familiares de las víctimas, como Ankie Spitzer, viuda del entrenador de esgrima Andre Spitzer.
Spitzer reavivó la polémica hace algunas semanas al acusar de antijudío al presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Jacques Rogge, por su negativa para guardar un minuto de silencio en recuerdo a las víctimas durante la inauguración de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Pocos días antes de la conmemoración del cuadragésimo aniversario del drama Israel desclasificó decenas de documentos que critican severamente el operativo alemán.
La República Federal Alemana no hizo el mínimo esfuerzo para salvar vidas
, estimaba uno de los jefes de los servicios secretos israelíes (Mosad) en uno de los documentos.
Las acusaciones incluyen francotiradores equipados con simples pistolas, vehículos blindados que llegaron tarde y policías sin linternas para seguir los movimientos nocturnos de los comandos.