Londres, 28 de agosto. Los adolescentes que se vuelven adictos a la cannabis antes de los 18 años podrían sufrir daños permanentes a su inteligencia, memoria y atención, según resultados de un extenso estudio a largo plazo.

Investigadores de Gran Bretaña y Estados Unidos hallaron que el uso continuo y en forma dependiente de la cannabis antes de los 18 años podría tener un efecto neurotóxico, pero después de esa edad parecería ser menos dañino para el cerebro.

Terrie Moffitt, sicóloga y profesora de neurociencia en el Instituto de Siquiatría de la Universidad del Colegio Real de Londres, dijo que el alcance y la extensión del estudio, que tuvo un seguimiento de mil personas durante 40 años, dan otro peso a los resultados.

“Es un estudio tan especial que tengo mucha confianza en que la cannabis no es muy dañina para cerebros de más de 18 años, pero riesgosa para menores de esa edad”, afirmó.

Antes de los 18, el cerebro aún se está organizando y remodelando para ser más eficiente y es tal vez más vulnerable al daño por las drogas, agregó.

Moffit trabajó con Madeleine Meier, investigadora doctorada de la Universidad Duke, en Estados Unidos, para analizar información de mil 37 neozelandeses que participaron en el estudio. Aproximadamente 96 por ciento de los integrantes originales de la investigación desde 1972 a la actualidad.

Análisis sicológicos

A los 38 años se sometió a todos los participantes a una serie de análisis sicológicos para evaluar su memoria, razonamiento, velocidad de procesamiento y proceso visual.

Quienes habían utilizado mariguana en forma constante como adolescentes registraron resultados significativamente peores en la mayoría de los análisis. Amigos y familiares entrevistados con frecuencia como parte del estudio informaron que los fumadores de mariguana tenían problemas de atención y memoria.

Los investigadores también hallaron que las personas que empezaron a usarla en la adolescencia y continuaron fumándola durante años mostraron disminución promedio en los resultados de exámenes de coeficiente intelectual (CI) de 8 puntos para las edades entre 13 y 38.

Fumador de mariguana con una máscara de gas en forma de pipa en el Festival del Cáñamo, efectuado recientemente en Seattle. En tres días de actividades asistieron alrededor de 150 mil pesonasFoto Ap

Los sujetos del estudio que empezaron a consumir mariguana cuando eran adultos con cerebros totalmente formados no mostraron disminuciones mentales similares, dijo Moffitt.

Moffit dijo que la disminución en el CI no podía ser explicada por el uso del alcohol u otras drogas o por tener menos educación, y Meier afirmó que la variable clave era la edad en que las personas habían comenzado a consumir mariguana.

Meier señaló que el mensaje del estudio era claro: La mariguana no es inofensiva, en particular para adolescentes.

Si bien 8 puntos de CI pueden no sonar como mucho en una escala en la que 100 es la media, Meier dijo que una disminución del CI de 100 a 92 significaría caer desde el percentil 50 al 29.

Coeficientes intelectuales más altos también se correlacionan con mayores niveles de educación e ingresos, una mejor salud y vida más larga, dijo Meier. Alguien que pierde 8 puntos de CI en la adolescencia puede quedar en desventaja (...) para el futuro, afirmó.

Robin Murray, profesor de investigación siquiátrica en el Instituto de Siquiatría, que no participó en el estudio, dijo que el trabajo era admirable y los resultados deberían ser tomados muy seriamente.

Este estudio proporciona una explicación de por qué sucedería eso, agregó.

Investigaciones anteriores sobre el uso de la cannabis también han señalado los potenciales efectos siquiátricos a largo plazo.

Un estudio publicado en marzo del año pasado halló que las personas que consumen mucha mariguana en su juventud aumentan dramáticamente el riesgo de sufrir síntomas sicóticos, y que el uso continuo de la droga puede incrementar el riesgo de desarrollar un desorden sicótico.

Meier señaló que no era posible establecer por este último estudio cuál sería la edad más segura para el uso continuo de la mariguana, o cuánta cantidad puede causar daños.

Según el informe de 2011 de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), que utilizó información desde 2009, entre 2.8 y el 4.5 por ciento de la población mundial entre 15 y 64 años –o entre 125 y 203 millones de personas– consumieron cannabis al menos una vez en los 12 meses anteriores.