Vecinos de la colonia Condesa protestaron en contra del ruido e incumplimiento de normas medioambientales por parte de los establecimientos mercantiles de la zona, como el centro nocturno Catwalk, ubicado en la calle Tamaulipas, que tiene una terraza gigante en donde se escucha la música muy fuerte hasta altas horas, como las cinco o las siete de la mañana, dijo Eynel Pilatowsky, una de las afectadas.

Los colonos, agrupados en las organizaciones Red Condesa, Asociación Colonos de la Condesa y Vecinos contra el Ruido denominaron a su movimiento Un año sin dormir –en referencia al periodo que lleva en funcionamiento el mencionado club– y explicaron que a pesar de que denunciaron dichas irregularidades ante la delegación y la PAOT, fueron remitidas a la Secretaría del Medio Ambiente local, la cual ha hecho caso omiso.

La escritora Rosa Nissán, también afectada, deploró: Parece que vivimos en una discoteca toda la semana, pues el lugar no sólo funciona de jueves a sábado, sino que de lunes a miércoles organizan fiestas privadas, y, desde hace un mes, abren los domingos.