Temamatla, Méx., 16 de agosto. La estrategia mexicana contra el crimen organizado está encabezada por hombres y mujeres totalmente capacitados en el uso de armas y tecnología de punta que tienen como principio fundamental salvaguardar la vida de los civiles no combatientes, aseguró el general brigadier diplomado de estado mayor, Carlos César Gómez, comandante de las Fuerzas Especiales del Ejército mexicano, que este jueves conmemoraron su 21 aniversario.

Rodeado de altos mandos de la Defensa Nacional y de la Armada de México, el general brigadier sostuvo que las Fuerzas Armadas seguirán dando la vida para resguardar la soberanía y la seguridad de esta nación, en un tiempo en el que el país vive retos y amenazas por los embates de la delincuencia organizada y el recrudecimiento de la violencia en días recientes.

Por su parte, el director de Fuerzas Especiales, teniente coronel de Infantería, Héctor Jiménez, indicó que durante las operaciones de alto impacto del Ejército se privilegia la seguridad de los civiles, pues el derecho internacional humanitario impide que las Fuerzas Armadas inicien el fuego previo a una agresión donde estén en riesgo las vidas de personas inocentes.

El jefe militar refirió que “primero tratamos de disuadir (al presunto delincuente) y con arengas tratamos de convencerlo de que deponga las armas, hasta tres veces se le grita ‘somos del Ejército Mexicano, salga con las manos en alto’, si desiste entonces recurrimos a la persuasión.

En esta etapa se recurre a los gases de humo, gases lacrimógenos y granadas aturdidoras. Es la fuerza no letal. Pero si no tenemos una respuesta positiva a los llamados de advertencia entonces aplicamos la fuerza letal, aquí se identifica la gente agresora y las personas que no tienen que ver con el grupo armado, sostuvo el director del Centro de Fuerzas Especiales durante unos ejercicios de exhibición.

Los integrantes de las Fuerzas Especiales simularon acudir a un domicilio en el que se denunció, mediante una llamada anónima, que en el interior se elaboraban drogas sintéticas.

El mando militar puntualizó que el objetivo principal del los efectivos del Ejército es proteger a la población civil que no tiene que ver con los grupos delincuenciales y privilegiar el respeto a los derechos humanos.

Antes de este simulacro, las Fuerzas Especiales festejaron su 22 aniversario con un desayuno y mariachi.

Esta unidad cuenta con 11 batallones desplegados en todo el territorio y se adjudica el abatimiento o capturas de importantes capos, lugartenientes y operadores del crimen organizado.

Desde el desayuno, el responsable de estas Fuerzas Especiales, el general Carlos Gómez, sostuvo que los elementos a su cargo son garantía de calidad y fortaleza, ante las nuevas amenazas se requieren elementos comprometidos, equipados y adiestrados, esta unidad de elite es lo mejor que tiene el Ejército.

Mandos de esas fuerzas que fueron entrevistados durante las exhibiciones indicaron que las deserciones están erradicadas casi en su totalidad.

En la década de los años 90 se dio una oleada de elementos de esas fuerzas especiales que desertaron para fundar la organización criminal de Los Zetas, entonces brazo armado del cártel del Golfo.