Frente al panorama de control de la industria, decidimos sólo bajar el ritmo
, señaló
No va a estar abierto todos los fines de semana; los actos serán más espaciados
, explicó el promotor y fundador del multiforo ubicado desde hace 16 años en la Roma
Los gobiernos de izquierdas deberían ser sensibles a la necesidad de espacios para la creación, sostuvo
Viernes 17 de agosto de 2012, p. 8
Tras rumores de que el único lugar independiente cultural vivo de la ciudad de México, el Multiforo Alicia, cierra sus puertas de manera definitiva, en entrevista con La Jornada, Ignacio Pineda, creador e impulsor del espacio, despeja las incógnitas sobre el futuro inmediato del lugar.
–¿Por qué habrá una pausa en el Multiforo Alicia?
–Los tiempos están cambiando y El Alicia va a dar un giro. Tras 16 años y medio, creemos que ha llegado el momento de ver las cosas con cierta perspectiva, abrir un compás de espera y trabajar de forma diferente.
“El Alicia ya no va a estar abierto todos los fines de semana. Los actos van a ser más espaciados. Por eso pedimos a nuestro público que esté atento a la programación. Seguiremos sacando carteles e informando y contribuyendo al debate en las redes sociales. Vamos a seguir haciendo charlas, grabando y editando discos, y seguiremos cediendo el espacio a colectivos afines.
“En México vivimos un momento de cambio, de incertidumbre en el plano político y económico. La cultura y el espectáculo libran una batalla por el control de los de los espacios culturales, los conciertos musicales y la programación... No podemos dejar que el monopolio cultural tenga el control de todo, la autonomía y la autogestión son necesarias y, como en estos 16 años, queremos seguir contribuyendo a ella, y alimentar la discusión sobre este tema.
–¿De qué se trata este cambio? ¿Qué se gana y qué se pierde?
–Estamos en un momento en que las grandes empresas de espectáculos están ganando terreno. Hay un gran monopolio en esa industria. Una misma empresa controla salas grandes, para 80 mil personas, y pequeñas, de menos de mil personas. El público roquero, que no es tan grande en México, tiene que elegir entre acudir a ver a bandas ya consagradas o ir a los espacios independientes. La economía de los mexicanos no da para todo. Los espacios pequeños, muchas veces, no podemos competir con este monopolio y muchos lugares se ven obligados a cerrar. Esta situación crea nuevas formas de trabajo en detrimento de la bandas; para subsistir, espacios que antes pagaban a las bandas ya no cobran entradas y las bandas, ya no ganan y tocan en peores condiciones, sin ingeniero de sonido, ni buen equipo de audio.
“Al no cobrar, los grupos no pueden rentar un cuarto de ensayo ni invertir para grabar o editar un disco. Esto es un paso atrás. Si los espacios independientes van desapareciendo, este gran monopolio podrá poner sus propias reglas, imponer gustos musicales y precios.
“Es cierto que hemos estado valorando la posibilidad de cerrar El Alicia, pero ante este panorama, decidimos mantenerlo abierto, darnos más tiempo y seguir realizando actos, aunque bajando el ritmo de trabajo. Es importante que artistas, músicos, público y promotores aprendamos a organizarnos, platicar, conocernos para generar una verdadera cultura democrática y participativa. Como dice Stephane Hessel: ‘Resistir es crear; crear es resistir’.”
–El Alicia, ¿seguirá en el mismo domicilio?
–Sí, de momento, en la colonia Rockma va a seguir siendo nuestra casa y la de todos ustedes. No obstante, nos gustaría tener un espacio con mejores condiciones, más grande, mejores servicios... Un espacio para hacer una fonoteca, ya que tenemos gran cantidad de discos y grabaciones; contar con una emisora de radio, una productora de videos; tener una sala de artes plásticas, una editorial, un comedor popular y un consultorio médico.
“La cultura es un derecho de todos. Sigue vigente nuestra reivindicación de que los espacios culturales abandonados y mal gestionados se entreguen a la comunidad artística.
“Todas las delegaciones deberían contar con espacios de cultura independiente y autogestiva. Así como la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura establece que por cada número de habitantes debería existir una biblioteca, lo mismo debería ser con los espacios culturales.
Acción del gobierno
“El papel del gobierno en este desarrollo es fundamental. Un gobierno de izquierdas, como el de esta ciudad, debería ser sensible a este problema. Dar facilidades para que existan espacios de cultura independientes, y que los jóvenes y los no tan jóvenes desarrollen sus proyectos artísticos.
En un país con desigualdad económica tan grande, las autoridades deben actuar para garantizar el derecho a la cultura, si lo dejamos a las leyes del mercado, gran parte de la población se quedará sin acceso a espectáculos.
–¿Qué sigue ahora en el Alicia?
–A finales de agosto comenzamos con los conciertos temáticos. Vamos a seguir editando discos. Próximamente vamos a lanzar el soundtrack de Zuloak, filme dirigido por Fermín Muguruza, que trata sobre una banda de chavas punks del País Vasco.
“También vamos a editar el próximo disco de Amparo Sánchez, uno de Telekrimen, el próximo trabajo de Espectroplasma, un recopilatorio de blues mexicano y otras sorpresas. Así que vamos a dar mucho que escuchar en los próximos meses.
El rock va a seguir, la música no se acaba.