Préstamos, empeños y tarjetas de crédito, en el estira y afloja de la compra de los útiles escolares
Sólo 35 por ciento de padres ahorraron para este gasto, según un sondeo de la Canacope
Viernes 17 de agosto de 2012, p. 36
Con préstamos familiares, empeños o ventas de prendas, tarjetas de crédito, vales de despensa o el reciclamiento de útiles y uniformes escolares, los padres de familia enfrentan el regreso a clases, que significará entre mil o 2 mil pesos por niño, aunque de acudir a escuelas privadas tendrán que desembolsar entre 5 y 16 por ciento más de lo previsto, al incrementarse el costo de la colegiatura.
La Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope) informó que la derrama económica en esta temporada será de mil 500 millones de pesos, de los cuales las tiendas departamentales y de autoservicio se quedarán con 44 por ciento, el comercio informal con 28 por ciento y los negocios pequeños con 17 por ciento.
Un gran número de pequeños comercios, sin embargo, registrarán pérdidas de entre 5 y 20 por ciento, al no estar en el programa de vales de útiles y uniformes escolares, aun cuando tres de cada 10 ofrecerán a sus clientes esquemas de compra a crédito, para enfrentar la competencia, obtener algunas ganancias y no verse en la necesidad de cerrar
, indicó.
El regreso de casi 2 millones de estudiantes de nivel básico significa la segunda temporada en importancia para el sector, después de las fiestas decembrinas, donde alrededor de 50 por ciento de los padres de familia gastan de 500 a mil pesos en uniformes, y de mil a 2 mil pesos en útiles escolares por hijo.
En 21 por ciento de los casos los adquieren en la escuela; 17, en tianguis; 32 por ciento realiza sus compras en tiendas departalmentales y especializadas, y 30 por ciento en papelerías tradicionales, plazas papeleras, ferias y exposiciones, ya sea por precio, surtido, calidad o porque reciben vales de despensa, indicó.
De acuerdo con el resultado de un sondeo realizado por la Canacope, únicamente 35 por ciento de los padres de familia ahorraron para enfrentar este gasto; mientras 60 por ciento utiliza vales de despensa o tarjetas de crédito, recurre a préstamos, al apoyo de la familia o a la venta o empeño de alguna prenda, lo cual en varios casos se ha convertido en una tradición. El 5 por ciento restante recicla los útiles, principalmente mochilas, cuadernos, lápices, plumas, calzado y diccionarios.
Las condiciones generales de la economía obligan a los padres de familia a realizar una selección cada vez más minuciosa de sus compras, orientándose principalmente por el precio y las facilidades de pago que ofrecen las tiendas de autoservicio y el ambulantaje, por lo que el pequeño comercio busca adaptarse mediante la implementación de diversas promociones dentro de sus capacidades.
De este modo, nueve de cada 10 negocios pondrá en marcha algún tipo de promoción para atraer a sus clientes como descuentos, ofertas, regalos, 2 por 1 o muestras gratis, y lograr un aumento en sus ventas de 60 por ciento, en promedio, aunque dicho porcentaje es menor en 10 puntos a lo esperado en igual temporada del año pasado, reconoció el organismo empresarial.