Sociedad y Justicia
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Admite la ENSM a 38 jóvenes que rechazó y 133 serán colocados en dos normales

Se logran los primeros acuerdos entre la SEP y el movimiento de aspirantes

Se buscarán mecanismos de ingreso para quienes no obtuvieron el puntaje establecido

 
Periódico La Jornada
Martes 14 de agosto de 2012, p. 37

Tras una jornada intensa de movilizaciones que incluyó un cerco de sueños a la Secretaría de Educación Pública (SEP), estudiantes que no obtuvieron un lugar en las principales casas de estudio y autoridades de la dependencia llegaron a algunos acuerdos que permitirán el acceso a la Escuela Normal Superior de México (ENSM) de varios jóvenes que fueron rechazados por esa institución.

Hasta el cierre de esta edición, los estudiantes continuaban en lo que fue la cuarta mesa de negociaciones con la dependencia. A las 23:00 horas valoraron si continuaban con las pláticas durante la madrugada o las reanudarían al día siguiente.

Después de una reunión con el director de la ENSM, Gonzalo López Rueda, autoridades de la Dirección General de Escuelas Normales y Actualización del Magisterio (DGNAM) y de la SEP, Aldo Santos, del Consejo Estudiantil de la ENSM, precisó que todos los que obtuvieron un puntaje mayor a 950 –mínimo requerido para el ingreso– en el examen del Centro Nacional de Evaluación (Ceneval) y que a pesar de ello fueron rechazados por solicitar un turno determinado, serán admitidos. En total suman 38.

También acordaron que los restantes 133 lugares disponibles en esa institución serán ocupados por estudiantes que buscaron ingresar a otras normales como la Benemérita Escuela Nacional de Maestros o la Escuela Normal de Educación Física.

Un tercer punto de coincidencia fue que se buscará el mecanismo para que aquellos que no obtuvieron el puntaje antes señalado y participaron en el movimiento puedan ingresar mediante otro proceso de evaluación, como prevé la normatividad, añadió Santos.

Atzelbi Hernández, del Movimiento de Aspirantes Excluidos de la Educación Superior (MAES), señaló que lo anterior fue un avance muy significativo, ya que serán ocupados todos los lugares disponibles en la ENSM, pues no podemos darnos el lujo de tener espacios vacíos cuando vivimos una situación de emergencia tan grave de jóvenes que no tienen acceso a educación superior.

La jornada fue larga. Por la mañana, los integrantes del MAES acudieron a una asamblea en la ENSM, después realizaron un brigadeo en el Colegio de Ciencias y Humanidades-Azcapotzalco, y de ahí salieron en una marcha hacia la DGNAM, ubicada en la calle de Fresno.

Alrededor de las 14:00 horas se realizó la reunión con las autoridades; más tarde, llegaron a la SEP para sostener la cuarta mesa de negociaciones. En el diálogo también participan los jóvenes del Movimiento de Estudiantes No Aceptados (MENA).

En la tarde-noche, los estudiantes cercaron con sus sueños las instalaciones de la dependencia educativa, ubicadas en la calle de Brasil.

Con cartulinas, decenas de jóvenes expresaron su deseo: Déjenme estudiar, quiero ser médico cirujano, no sean egoístas, decía en su cartel un joven apostado en la esquina con la calle de Cuba. En una larga fila, una joven portaba un letrero en el que expresó: Para qué destruir nuestros sueños si juntos podríamos hacer que México sea mejor. Y otro más: Me dicen rechazado, yo digo: el próximo licenciado. Otra joven: Yo tenía un sueño, pero el examen de selección me lo destruyó.

En el portón de madera de la secretaría, los jóvenes colgaron los ojos de Dios, una artesanía de estambre con la figura de un rombo multicolor. Esto, con el propósito de expresar su intención: poder estudiar.